Alimentos Marinos (Alimar) anunció la desvinculación de 400 trabajadores ante el efecto que
tuvo en la empresa la ley de la jibia. Se trata de 350 trabajadores de plantas en Coronel y
Valparaíso, sumado a otros 50 empleos asociados directamente al fin de las operaciones del
barco pesquero Terranova, que salió de circulación y se encuentra en Calbuco en etapa de boat
parking.
«Esta es una situación que advertimos durante toda la tramitación de esta ley, enfatizando que
no fueron adecuados los criterios técnicos de su aprobación y creemos que este es un golpe
durísimo al empleo para aquellas regiones pesqueras donde operamos», sostuvo el gerente
general de Alimar, Claudio Salazar.
El ejecutivo agregó que en estas condiciones «no es posible para la industria la proyección de
nuevas inversiones debido a la incertidumbre que la autoridad, y en particular, el Congreso, han
instalado para el sector pesquero industrial con proyectos de ley que atentan contra el empleo y
el desarrollo del país y donde predominan criterios políticos y populistas».
En este sentido, Alimar informó que el negocio de la Jibia representa el 33% de la utilidad y con
motivo de la aprobación de la denominada Ley de la Jibia, la compañía dejó en carpeta una
inversión de US$450.000 que pretendía mejorar el equipamiento para agregar valor a los
productos que se elaboran en la planta de congelados ubicada en Coronel, además del receso
obligado de un barco pesquero cuyo valor bordea los US$6 millones junto con pérdidas anuales
de US$15 millones por concepto de exportaciones de productos derivados del calamar gigante.
Fuente: Diario Financiero