La fruticultura se está posicionando como el área más dinámica de la agricultura en lo que va del año. Entre enero y octubre se han exportado un total de 2,67 millones de toneladas, cantidad que supera en 4,7% a todo el volumen de frutas exportado el año pasado, que totalizó envíos por 2,55 millones de toneladas. Además, según cifras de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa), dichos embarques han representado ventas por US$ 4.434 millones en los diez primeros meses de este año, apenas 0,04% por debajo de los US$ 4.436 millones que significaron todas las exportaciones de estos productos en el año pasado.
El presidente de la Asociación de Exportadores de Frutas (Asoex), Ronald Bown, puntualizó que la temporada de exportación se prolonga entre septiembre y agosto del año entrante, por lo que las cifras de este año contienen datos de la temporada anterior y de la campaña que aún está en desarrollo. Sin embargo, destacó que «el aumento en los envíos de frutas se explicaría, principalmente, debido a que en la temporada pasada se alcanzaron exportaciones históricas en frutas como cerezas y arándanos».
Pese a que China continúa posicionada como el segundo destino para la fruta chilena en orden de importancia, la demanda desde el país asiático se ha convertido en la principal impulsora de las exportaciones en este subsector agrícola. Sin ir más lejos, en 2012 se realizaban envíos por 119 mil toneladas hacia este mercado, mientras que en lo que va de 2018 el volumen exportado superó las 340 mil toneladas, lo que muestra un relevante incremento de 2,85 veces en un período de seis años. En tanto, Chile ha más que triplicado el monto en ventas de fruta al gigante asiático en el mismo período, pasando de US$ 352 millones a US$ 1.140 millones.
Bown destacó que China se ha posicionado como uno de los mercados más relevantes para la industria frutícola local. «Durante 2017-2018, China-Hong Kong consolidó un récord en exportaciones recepcionando 390.218 toneladas de frutas chilenas, el mayor volumen registrado en las últimas seis temporadas», dijo el dirigente gremial. Lo anterior, principalmente por el aumento del volumen de cerezas, cuyo principal destino es China, que recepciona más del 90% de esta especie.
El presidente de la Federación de Productores de Fruta, Jorge Valenzuela, coincidió en que «el empuje de China se debe básicamente a las cerezas, aunque hoy compran todo tipo de frutas frescas. Es un mercado mucho más dinámico que antes. Los nectarines y los arándanos también están entrando fuerte a ese mercado. El auge de China recién comienza y se va a profundizar mucho más», sostuvo.
El país asiático representaba en 2012 un 9,2% de las exportaciones para la fruta chilena en circunstancias que este año ha concentrado un 25,7%. Este caso es opuesto al de Estados Unidos, que sigue siendo el principal destino para los embarques locales, pero pasó de representar 37,1% de los envíos en 2012 a un 30,6%. El presidente de Fedefruta estimó que países competidores de Chile, como Perú, han logrado tener más presencia en este mercado, por lo que pidió que la calidad y la consistencia de la fruta de exportación sea óptima para poder obtener mejores retornos en los mercados de destino. Además, estimó que la guerra comercial entre Washington y Beijing también podría estar teniendo un daño indirecto para Chile, que eventualmente se ha expresado en un menor avance de sus envíos hacia Estados Unidos. En tanto, el líder de Asoex sustentó que la menor participación del país norteamericano en la fruta chilena responde a «una mayor diversificación de los destinos ya que la industria está buscando diversificar sus exportaciones, potenciar nuevos mercados y nichos, así como abrir nuevos mercados».
En cuanto a las variedades de fruta exportadas este año, las uvas han representado el 26,9% de las ventas al extranjero, las cerezas han concentrado un 18,6%, los envíos de manzanas han significado un 15,5% y los embarques de arándanos han sido el 11,2%. Así, estas cuatro especies han concentrado más del 72% del total de las exportaciones de fruta durante el año.
En relación con los desafíos para la actual temporada, Bown señaló que las condiciones agroclimáticas que se han presentado este último mes han significado algún tipo de daño en algunas especies de temporada. «No obstante, estimamos que será una buena temporada, si es que no ocurren eventos climáticos o algunos problemas derivados de la situación logística en los puertos», sostuvo.
Fuente: El Mercurio