El Port de Barcelona tiene en la actualidad las mejores infraestructuras, servicios y conectividad para contenedores refrigerados del Mediterráneo. Las terminales de contenedores -BEST, perteneciente al grupo Hutchison y APM Terminals Barcelona-, así como la terminal multipropósito Port Nou han desarrollado en los últimos años importantes proyectos para ampliar el número de conexiones eléctricas destinadas a los contenedores refrigerados, superando actualmente las 3.500 conexiones reefer permanentes, lo que sitúa en el puerto barcelonés líder del Mediterráneo para este tipo de tráfico.
Esta optimización de infraestructuras ha ido acompañada de mejoras operativas en el punto de inspección fronterizo (PIF) para agilizar al máximo el paso de productos frescos y del desarrollo de unos servicios muy competitivos que incluyen una cada vez más amplia oferta de conexiones viales y ferroviarias regulares y fiables con los principales mercados mayoristas del Estado español, como Mercabarna, Mercazaragoza y Mercamadrid, y el mercado de Saint-Charles, en el sur de Francia, así como conexiones marítimas con los principales orígenes de los productos hortofrutícolas.
Con esta carta de presentación ha desembarcado hoy el Port de Barcelona en Fruit Attraction, la principal feria hortofrutícola del Estado y la segunda de Europa, que se celebra en Madrid hasta el 7 de octubre. Dentro del espacio Cataluña (Pabellón 4, stand 4D03B), el Port de Barcelona presenta una oferta conjunta con Mercabarna y la Asociación de Empresarios Mayoristas de Frutas y Hortalizas de Barcelona y Provincia (AGEM) para asesorar a los potenciales compradores profesionales que lo visiten y puedan encontrar las empresas que mejor respondan a sus necesidades comerciales y de transporte y logística. La delegación del Port de Barcelona en Fruit Attraction está formada por Carla Salvadó, subdirectora general de Comercial y Marketing; Carles Mayol y Lluís París, commercial managers; Javier Mendez y Olga Salvador, analistas de producto; y Miguel Ángel Palomero, representante del Port de Barcelona en Madrid.
Oferta intermodal
La consolidación del modelo barcelonés de terminales interiores para acercar los servicios del Port a sus clientes ha sido un éxito: hoy, buena parte de los productos refrigerados que se exportan desde el recinto portuario llegan hasta los muelles por tren a través de los servicios que se ofrecen con la Terminal Marítima de Zaragoza (tmZ) o con las terminales ferroviarias de Madrid, Noain, Monzón, Miranda de Ebro o Villafría, entre otros. Un ejemplo es el éxito del servicio ferroviario exclusivo para carga refrigerada Canal Frío, que conecta diariamente Zaragoza y Barcelona. O el servicio de carga refrigerada entre la terminal de Monzón (TIM) y el Port de Barcelona con hasta 4 conexiones semanales.
Con respecto a la conectividad marítima, Barcelona mantiene una posición relevante en el mapa portuario mundial y en los últimos meses ha mejorado algunos de sus servicios regulares de contenedores, ofreciendo unos tiempos de tráfico y unos costes altamente competitivos.
Conexión adaptada a las necesidades
También se han puesto en marcha nuevas líneas marítimas que mejoran las conexiones de Barcelona con diferentes puntos del Mediterráneo, como la línea regular para carga rodada de Grupo Suardíaz entre Barcelona y Tánger, preparada para transportar contenedores y plataformas a temperatura controlada. Con dos salidas semanales y un tiempo de tráfico de 35 horas, este servicio está especialmente indicado para los productos hortofrutícolas y con una gran proyección específica sobre los productos frescos destinados al mercado de Saint Charles. Estudiando las necesidades del servicio, se han hecho importantes esfuerzos de coordinación de los servicios aduaneros y paraaduaneros que garantizan un tráfico rápido, fiable y eficiente por el Port. El barco puede cargar hasta 120 semirremolques no acompañados por trayecto y no se ve afectado en ningún momento por la entrada de pasaje, una petición muy demandada en el sector.
Otro servicio destacado es el Med Turkey Express, que opera JSV Logistics junto con el agente de carga Marmedsa y que une Barcelona con los puertos turcos de Gebze y Ambarli en tan sólo 3 días, un tiempo de tráfico que abre nuevas oportunidades de negocio en el sector agroalimentario.
Por su parte, la naviera Grimaldi ha hecho recientemente una importante apuesta por la sostenibilidad en el Port de Barcelona, poniendo en funcionamiento la nueva flota de barcos ro-ro híbridos de la nueva clase Green 5th Generation que operan en el Mediterráneo entre España e Italia y que tienen más capacidad que las naves anteriores, optimizando así el servicio y reduciendo costes.
Fuente: portdebarcelona.cat