Las exportaciones del MERCOSUR crecieron un 13,8% en 2017 en un contexto de esfuerzos por modernizar el acuerdo regional, según un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), elaborado por su Instituto para la Integración de América Latina y el Caribe (INTAL) del Sector de Integración y Comercio.
Este es el primer incremento de las ventas externas del bloque en cinco años.
La publicación «Renovando la Integración» es un reporte anual que analiza los principales aspectos de la evolución de este bloque sudamericano, embarcado en un proceso de profundización y actualización.
Cifras macroeconómicas
En el plano económico, la actividad de los integrantes del acuerdo experimentó un crecimiento promedio del PIB de 2,8% en 2017. La evolución del comercio mundial contribuyó a la mejoría del cuadro macroeconómico interno, favoreciendo una expansión de las exportaciones totales del bloque de 13,8% durante ese año. El comercio entre los miembros de MERCOSUR subió un 16,4% en el primer semestre de 2017, por encima del comercio extrazona.Por su parte, la agenda de integración del bloque avanzó gracias a esfuerzos por modernizar el acuerdo. Por primera vez, el MERCOSUR cuenta con un instrumento para facilitar las inversiones intra-bloque y con un régimen de compras gubernamentales.
Asimismo, se avanzó en la remoción de un grupo importante de obstáculos al comercio intrazona, identificando 43 trabas que están siendo monitoreadas. Y el bloque se ha propuesto desarrollar una moderna agenda digital de integración y ha reafirmado la importancia del Fondo para la Convergencia Estructural como instrumento para disminuir las asimetrías entre sus países.
Alejandro Ramos, especialista senior del INTAL, afirmó que el MERCOSUR se encuentra ante una coyuntura que podría favorecer la profundización del proceso de integración regional. “Estamos en un momento en el que la incertidumbre global permite revalorizar los esquemas de integración regional como el MERCOSUR y la Alianza del Pacífico. El objetivo es superar los eslabones faltantes de la integración regional en aras de garantizar mercados más amplios que sirvan como plataforma para la innovación tecnológica y el fortalecimiento de la competitividad exportadora”.
Adicionalmente, Ana Inés Basco, especialista de integración del Instituto, destacó el surgimiento de un cuadro de opinión pública regional favorable a la profundización de los procesos de integración, según los resultados de los estudios realizados por la alianza INTAL-Latinobarómetro. “En contraste con otras regiones, en América Latina”, dijo Basco, “la opinión pública percibe un déficit de integración, y la profundización de estos procesos es valorada positivamente por amplios segmentos de la población.”
El MERCOSUR ha retomado varios frentes de negociación externa donde se destaca el proceso de aproximación con la Alianza del Pacífico cuyo principal resultado es el establecimiento de una Hoja de Ruta que cubre temas de facilitación comercial, optimización de reglas de origen, identificación de cadenas regionales de valor, promoción comercial y PYMES, cooperación aduanera, barreras no arancelarias y facilitación del comercio de servicios.
Por otra parte, la negociación con la Unión Europea tuvo una intensificación y el MERCOSUR inició tratativas con el Acuerdo Europeo de Libre Comercio (EFTA, por sus siglas en inglés) y Canadá. Adicionalmente ha buscado mejorar acuerdos existentes (con India) y abrir negociaciones en el área Asia-Pacífico, con la República de Corea, Japón, Australia, Nueva Zelanda y con el bloque ASEAN.
Fuente: Estrategia