Más de 4.000 millas náuticas navegará la Unidad realizando diversas tareas entorno al Círculo Polar Antártico.
Tras intensas labores de carga, el AP-41 “Aquiles” zarpó el viernes 13 de marzo desde Punta Arenas para iniciar su segunda comisión al continente blanco de este año, en el marco de la Campaña Antártica 2019-2020.
En ese sentido, y de acuerdo a lo planificado, el buque de transporte de la Armada de Chile pasará entre 30 y 35 días navegando más de 4.000 millas náuticas para efectuar tareas logísticas y de apoyo estratégico a diversos operadores que cumplen diversas labores en el continente blanco, en cumplimiento al Tratado Antártico firmado por nuestro país en diciembre de 1959.
Al respecto, el Comandante de la Unidad, Capitán de Fragata Jorge Ibarra, manifestó que “esta segunda comisión es más extensa y vamos a tener diferentes desafíos. Uno de ellos es cruzar el Círculo Polar Antártico en demanda de Bahía Margarita, ubicada al sur de la Isla Adelaida, porque vamos a materializar una serie de contribuciones al apoyo de la Investigación Científica tanto en la Base Carvajal, en Glaciar Miller y en cercanías de la Base Rothera del Reino Unido”.
En total son alrededor de 140 toneladas de carga que el “Aquiles” embarcó con destino a la Antártica y 250 toneladas que se trasladarán hacia Punta Arenas, destacando casi 150 toneladas de basura junto con la carga asociada al cierre de diversas bases.
Además, más de 100 científicos e investigadores serán transportados en esta comisión, tarea que será apoyada por una barcaza skua y por los helicópteros Bolkow N-44 y N-46, que totalizarán más de 40 horas de vuelo cumpliendo labores de conexión entre el buque y el continente blanco.
Patrulla Antártica Naval Combinada (PANC)
En el contexto de su segunda comisión Antártica, el AP-41 “Aquiles” desarrollará actividades como Buque de Servicios Antárticos formando parte de la Patrulla Antártica Naval Combinada (PANC) que se hace entre Chile y Argentina.
Según el Comandante Ibarra, este trabajo considera “controlar el tráfico marítimo en las áreas aledañas al continente blanco y, por supuesto, verificar el cumplimiento de normas internacionales de combate a la contaminación”.
Al respecto, el Oficial destacó que “es muy relevante la labor del buque para prevenir el daño que pudiesen provocar los barcos que transitan por las aguas de la Antártica. Nuestra labor dentro de la PANC es hacer prevalecer cada uno de los acuerdos que contribuyen a la preservación de las especies, a respetar las normas contra la contaminación y, por supuesto, a permitir el libre tránsito en las áreas de la Antártica, permitiendo que sea un área donde todas las naves que se desplazan por sus aguas coexistan y contribuyan a su conservación”.
Las tareas desarrolladas dentro de las Campañas Antárticas de la Armada de Chile son fiel reflejo de su compromiso con la política exterior del país al cumplir con diversos acuerdos internacionales suscritos por esta nación, junto con la responsabilidad que posee la Institución respecto al cuidado del medio ambiente acuático.
Fuente: Armada de Chile