Chile apuesta a ser el segundo exportador mundial de nueces, pese a que precios del sector están a la baja

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Era 1987 cuando Javier Plaza decidió emprender su propio negocio. Llevaba tiempo trabajando en el mundo de la agricultura y quería dar el siguiente paso. Ese año fundó la compañía Frutas de Exportación S.A. o, como mejor se le conoce, Frutexsa. Partió exportando ciruelas, después se dedicó a las almendras, ambos mercados en los que actualmente lidera. Pero luego llegaron las nueces.

«Frutexsa nace conmigo», explica Plaza. «Las nueces son un producto que se ha plantado mucho y que da espacio para crecer», agrega el empresario -hermano del cantante Alberto Plaza-, quien lidera una de las 10 mayores exportadoras chilenas de nueces.

Su caso es un ejemplo de cómo esta industria se ha expandido en Chile. En los últimos cinco años, el volumen de producción de estos frutos secos -con y sin cáscara- pasó de 21.231 toneladas en 2010, a 51.292 en 2015 y ya suma envíos valorados por sobre US$ 350 millones.

Con estas cifras, Chile se sitúa como el cuarto mayor productor de nueces y como el tercer mayor exportador a nivel mundial, considerando que la producción nacional se destina casi en su totalidad a los mercados externos. La industria ve el futuro con optimismo y varias compañías proyectan aumentar la producción. Esto, pese a que los precios han disminuido desde 2015.

Según el presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de Nueces de Chile, Chilenut, Juan Luis Vial, la industria «ha conservado su gran crecimiento en forma estable durante los últimos 10 a 12 años, con aumento en las plantaciones del orden de 2.000 a 2.500 hectáreas al año». Desde la Asociación Gremial de Procesadores y Exportadores de Nueces de Chile, Chilean Walnut Commission, sostienen que en 2016 las nueces ocupaban una superficie total plantada de 40.338 hectáreas.

Juan Luis Vial estima que un crecimiento en la producción puede llevar a Chile a generar unas 185.000 toneladas en los próximos 10 años, «lo que nos convertirá en líderes de la industria internacional, consolidando un segundo lugar en las exportaciones mundiales», estima. Esa segunda posición hoy la tiene Ucrania, en una industria en que el líder mundial en exportaciones de nueces es Estados Unidos.

Precios vienen a la baja

Pese a estos buenos augurios, la industria está enfrentando un escenario de menores precios (ver infografía), luego de dos muy buenos años, 2013 y 2014, en que parecía vivirse un boom en el sector de las nueces.

Todo habría comenzado en 2015, cuando, de acuerdo con el entonces presidente ejecutivo de Chilean Walnut Commission, Andrés Rodríguez, la devaluación de monedas y diversos problemas financieros en mercados internacionales, sumado a mayores niveles de stock y producciones en el hemisferio norte, generaron «una temporada con precios más bajos y dificultades en la comercialización».

«Los precios ya han bajado entre 20% y 30% con respecto a la temporada anterior y podrían incluso seguir bajando», pronosticaba Rodríguez en un artículo de la Revista del Campo, de «El Mercurio», en noviembre del año pasado.

Javier Plaza concuerda. «En los últimos 10 u ocho años hemos venido de precios espectaculares en las nueces y, a pesar de los aumentos de las producciones, los precios han sido sostenidamente altos. Esto hasta el año pasado, cuando el segundo semestre cayeron en forma importante, porque se veían producciones muy buenas en Estados Unidos, en California.

Todavía tenían algo de stock de la temporada pasada, y los americanos salieron a vender lo que les quedaba a precios bastante más bajos de los que veníamos viendo en los últimos años», explica desde su oficina el presidente de Frutexsa.

Este año, el panorama en Chile tampoco remontó. Juan Sutil, fundador de Pacific Nut, explica que las lluvias durante febrero y marzo, en medio de la temporada de cosecha de las nueces, tuvieron resultados negativos en la calidad de los productos. A esto se le sumaría una caída del valor del fruto seco.

«El año 2016, los precios internacionales bajaron entre 30% o 35% en diferentes tipos de productos o formatos y eso, creo, se va a quedar un buen tiempo en estos niveles de precios, por distintas razones: primero, porque hay una deflación de la demanda mundial, en términos de crecimiento del mundo, y segundo, porque hay un buen nivel de producción tanto en China, que es el principal productor, como Estados Unidos, que es el segundo productor», sostiene el empresario.

Producción en Chile irá al alza

Pero pese a la baja en los valores de las nueces y a la mala temporada vivida en Chile, en comparación con las producciones récord de Estados Unidos y China, los exportadores chilenos apuestan por elevar el volumen de producción.

«En el caso particular de nosotros, cuando decidimos ir fuerte a tomar una posición de mercado y a tomar una porción de la producción nacional, primero aumentamos nuestras plantaciones propias, hicimos una inversión en plantaciones y hoy día tenemos 250 hectáreas. Hemos invertido en maquinaria en la parte agrícola, maquinaria de cosecha automática, en secado de nueces y, si bien no hemos dejado de partir las nueces a mano, construimos una planta de proceso mecánico», cuenta Javier Plaza.

«En el caso de Pacific Nut, las proyecciones nuestras son triplicar nuestro volumen en los próximos cinco años. Significa que estamos haciendo inversiones importantes en este desarrollo. Son inversiones que superan los US$ 8 millones en los próximos años, para poder atender los volúmenes de nuestra propia producción y también para la producción de nuestros productores asociados a la cadena comercial de Pacific», agrega Juan Sutil.

Con este aumento del volumen de producción, Chile podría aprovechar potenciales nuevos mercados, por ejemplo, si se da una mayor apertura de China y otros países.

«Miramos con optimismo el largo plazo y creemos que la incorporación reciente de China y próximamente de los países del sudeste asiático, hará crecer potencialmente el mercado de frutos secos chilenos, agregando a esto los eventuales acuerdos comerciales con los países del norte de África, grandes consumidores de nueces, los cuales todavía no se incorporan a la canasta chilena», argumenta el presidente de Chilenut, Juan Luis Vial.

Envíos van a Europa, Asia y Brasil

«Yo me desarrollé, al igual que mis socios de la exportadora, en el sector eléctrico chileno, hasta la venta de Enersis a Endesa España en 1997», rememora el directivo de Huertos del Valle, Marcelo Brito. «En el mercado de las nueces estoy desde 2008, donde fui invitado a participar en Huertos del Valle por Eduardo López, a quien conocía desde años, cuando trabajamos juntos en Enersis S.A.», añade.

El empresario -antaño vinculado al llamado «caso Chispas»- comenta que el destino de sus nueces sin cáscara, aquellas partidas a mano son principalmente enviadas a Europa, especialmente a Suiza. Las partidas mecánicamente también van a parar a suelos europeos, y a Brasil, Corea y Japón. Y las nueces con cáscara son mayormente vendidas a Turquía y parte de Dubái, países que luego se encargan de distribuir los frutos secos por Medio Oriente.

A nivel industria, los principales destinos de las nueces chilenas -tanto con cáscara como sin esta- se encuentran en Europa y Asia. En el Viejo Continente, los consumidores más importantes son Italia, España, Alemania y Suiza. Mientras que en Asia se están abriendo los mercados en Corea del Sur, India y China.

Este país, a pesar de ser el principal productor de nueces, no siempre alcanza a cubrir toda su demanda interna, por lo que una apertura total de este mercado significaría una gran oportunidad de posicionarse para los productores de nueces chilenos. Otros países a los que Chile provee son los Emiratos Árabes y Turquía, además de mercados emergentes, como Vietnam, Tailandia e Indonesia. Dentro de Latinoamérica, el destino principal es Brasil, cuyas importaciones de nueces ya son una tradición para los empresarios chilenos

Fuente: El Mercurio