Marine Harvest plantea desacuerdo con propuesta sanitaria del Gobierno

«Es positivo que el gobierno quiera regulaciones más estrictas, pero no estamos de acuerdo con la política de instrumentos planteados en la nueva propuesta del reglamento sanitario». Esta es la posición de Per-Roar Gjerde, gerente general de la filial local de la mayor salmonera del mundo, Marine Harvest, en torno a los planteamientos de la autoridad para la regulación sanitaria de la industria en Chile. La operación de la compañía de capitales noruegos ha ido reduciendo sus volúmenes de producción en nuestro país, convirtiéndose en la subsidiaria con menores cosechas en el mundo. A su vez, la compañía se salió de SalmonChile en julio, justamente por discrepancias en materia de regulación sanitaria.

El ejecutivo manifestó que el viernes 23 de septiembre enviaron a la autoridad una respuesta a la nueva normativa que propone la Subsecretaría de Pesca, Subpesca. Esta era la fecha límite para que las salmoneras plantearan sus observaciones al plan de la autoridad para configurar el reglamento. Precisó que la firma ha expuesto una fórmula que haría posible la reestructuración de la industria y mejoraría la situación sanitaria, en parte, «porque proponemos separar las instalaciones de las concesiones. Esto no está contemplado en las nuevas regulaciones propuestas por el Gobierno».

Entre sus proposiciones, el gerente general de la firma indicó que se debe decidir una biomasa total sustentable de salmón para todo el país; dividir esta producción máxima autorizada en las 1.300 licencias que existen en Chile; separar las unidades de producción de las licencias y asegurar que una licencia tenga derecho a producir una determinada cantidad de toneladas. «En este punto coincidimos con varios líderes de la industria, quienes mayoritariamente creemos que 650 mil toneladas de cosecha nos dan una base adecuada antes de evaluar potenciales crecimientos», indicó.

Añadió que otro de los ejes planteados es que una unidad de producción tenga más de una licencia. Esto -explicó- va a reducir la cantidad de instalaciones y establecerá mayor distancia entre unidades de producción.

Asimismo, propuso acordar el establecimiento de indicadores biológicos para reducir el nivel de Caligus (también conocido como piojo de mar, que afecta a los salmones) por pez y el uso restringido de antibióticos. «Un futuro crecimiento o una futura reducción (de producción) se deben basar en el rendimiento, según los indicadores biológicos. Esto puede ser según el rendimiento en cada sitio y con tope anual del 3% (de mayor producción)», sostuvo. En este punto, el gremio discrepa por considerar bajo este umbral.

El ejecutivo agregó que en este último tiempo se han reunido con representantes del Gobierno, para mostrarles su visión, «y pienso que vamos bien. A petición de ellos, tuvimos una reunión el pasado lunes 5 de septiembre, donde presentamos nuestro punto de vista acerca de las modificaciones necesarias para que mejore la industria. Esto demuestra que es posible exponer nuestras ideas como empresa. Si hubiésemos seguido en SalmonChile, quizá no habríamos podido presentar nuestro discurso con la misma fuerza».

Precisó que en esos encuentros, en que también estuvo presente SalmonChile, «comentamos con las autoridades nuestra proposición de relocalización. Les mostramos cómo se ordenan los centros de cultivo en Noruega, solo para darles a entender que tenemos un sistema que funciona y que hace que la compañía (Marine Harvest) pueda cultivar salmón de manera sustentable. Todo puede ser mejorado. Además de esto, les mostramos algunas debilidades de la regulación emanada desde el Gobierno».

Por último, dijo que aún no hay respuestas claras frente a estos planteamientos con miras a un nuevo escenario normativo. No obstante, acotó que la ley se debe cambiar, y no solo añadir algunas regulaciones. «Necesitamos algo más fuerte, lo que toma tiempo. Hay que comenzar y pensar a largo plazo», concluyó.

Fórmula sanitaria
Marine Harvest expuso una fórmula que, en su opinión, mejoraría la situación sanitaria.

«Un futuro crecimiento o una futura reducción (de producción) se deben basar en el rendimiento, según los indicadores biológicos».

Fuente: El Mercurio