Por segunda vez en lo que va del proceso de evaluación ambiental, la Empresa Portuaria de Valparaíso (EPV) y Terminal Cerros de Valparaíso (TCVAL) alcanzaron un acuerdo para extender la cláusula de salida del proyecto de modernización del Terminal Dos que lleva adelante el concesionario.
En lo medular, esta modificación significa mantener las mismas condiciones suscritas en el marco del contrato de concesión inicial, y lo que se busca es actualizar los alcances contractuales atendiendo el contexto de mercado.
Más tiempo
Pero, a diferencia de aquella oportunidad, en que el periodo de ampliación -que vence hoy- fue de 12 meses, esta vez el plazo estipulado entre ambas partes alcanzó a 22 meses, es decir hasta octubre de 2018. Durante este lapso, el terminal podrá poner término de manera unilateral y anticipadamente al contrato.
Ya a fines del mes de noviembre la estatal confirmó las conversaciones para alcanzar este objetivo, las que venían desarrollándose con frecuencia desde el último trimestre.
Uno de las variables que más se discutió fue sobre el plazo de la extensión y donde finalmente se llegó a un consenso en virtud de que la empresa pueda enfrentar con cierta holgura el proceso por el cual transita. De hecho muchos de los análisis que ha debido efectuar la firma para responder las observaciones de los servicios son de carácter estacional lo que necesariamente aumenta los márgenes de tiempo establecidos originalmente.
TCVAL realiza actualmente estudios para responder a la segunda Icsara que contiene más de 300 observaciones de los servicios públicos acerca del emplazamiento.
Hay que recordar que si bien la concesión fue adjudicada en abril de 2013 a la española OHL Concesiones, el ingreso del estudio de impacto ambiental se presentó en septiembre de 2014.
Tras ello la iniciativa recibió casi 400 observaciones, ante lo cual el titular decidió realizar una serie de modificaciones sustanciales como el hecho de reemplazar el lugar original de la cantera y suprimir el traslado de material por vía marítima, entre otras.
Todo ello obligó a un nuevo proceso de participación ciudadana, más abreviado, que terminó en los reparos que actualmente estudia la firma y que pretende responder en abril de 2017 aunque en rigor tiene plazo hasta el mes de agosto.
Pago compensatorio
Además, y tal como aconteció en la negociación de fines del año pasado cuando TCVAL debió pagar una compensación cercana a los US$ 3 millones, esta vez también se estipuló un monto en el mismo sentido que alcanza los US$ 3,35 millones, o sea más de $2 mil millones.
A ello se suma que, en el documento firmado ayer, se establece un aporte adicional por parte del concesionario del Terminal Dos destinado al Fondo de Responsabilidad Social establecido en el Contrato de US$ 400.000 pagadero en dos cuotas iguales al año 2018 y 2019.
Indicios
Antes de concretarse el acuerdo entre la estatal y el concesionario del T2 los indicios eran favorables a un entendimiento teniendo como principal fundamento el interés permanente expresado por TCVAL en perseverar en el plan de expansión portuaria.
En esa línea, y desde el punto de vista de la estatal, esta ampliación del plazo de la cláusula de salida o «way out» confirma el interés de la empresa en permanecer en Valparaíso.
A ello se suman resultados operacionales que van en línea con lo proyectado y otras gestiones como ser el primer terminal portuario del país en certificarse bajo tres normas de gestión en un mismo proceso. La auditoría correspondiente, realizada por la casa certificadora Lloyd’s Register, se desarrolló en el mes de agosto.
El desafío que tiene ahora la empresa es responder las observaciones y lograr la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) que le permita iniciar el proyecto. Ello en medio de un debate acentuado por un estudio patrimonial del experto colombiano Juan Luis Isaza y de un informe de Contraloría que dejó interrogantes sobre la obra.
AUMENTAR CAPACIDAD PORTUARIA
Con un frente de atraque de 785 metros que permitirá atender de manera simultánea a dos buques de la línea postpanamax, la extensión del Terminal Dos permitirá a Valparaíso contar con capacidad para albergar a cuatro de estas naves considerando la reciente extensión de 120 metros del Terminal Uno. Con ello, además la zona central contará con cuatro enclaves -sumando a STI y Puerto Central de San Antonio- para responder de buena forma a la demanda del comercio exterior, de acuerdo a los niveles de crecimiento que muestra actualmente la economía nacional.
US$ 500 millones es la inversión que contempla la ampliación del Terminal Dos de Valparaíso.
2013 en abril de ese año la española OHL Concesiones se adjudicó la licitación del proyecto.
$ 2.000 millones aproximadamente es la suma que TCVAL deberá pagar en compensaciones.
2018 es el año en que vencerá la nueva cláusula de salida pactada entre la estatal y el concesionario del T2.
Fuente: El Mercurio de Valparaíso