El tráfico de contenedores continúa creciendo a buen ritmo y está a punto de superar los 200 millones de TEUs llenos en 2017. Sería la primera vez que se logra un hito así, según recoge el último informe de la consultora Drewry, que tendrá que modificar ligeramente sus previsiones.
El Índice de Tráfico Portuario de Contenedores ha aumentado un 8,5%, llegando a situarse en septiembre 10 puntos por encima del mismo mes de 2016. La tendencia, independientemente de las fluctuaciones mensuales, ha sido positiva durante 2017, tras unos datos más discretos el año anterior.
Las cifras del noveno mes del año revelan que el crecimiento se ha extendido por todas las regiones, destacando Norteamérica, con un 12,6%, Latinoamérica con un 11,1% y China con un 10,3%, mientras que en Europa el incremento del tráfico ha sido del 4,4%.
En cuanto a las rutas, solamente las existentes entre Asia y Oceanía, y entre Europa y Oriente Medio han registrado datos negativos. En general, las conexiones Este-Oeste, que conectan Asia, Norteamérica y Europa, se han mantenido fuertes, aportando un 5% al tráfico adicional frente al 3,4% de las conexiones Norte-Sur.
En este caso, el 30% procede de las rutas internas de Asia, incluyendo las de China. Le siguen las líneas de contenedores entre Asia y Europa y las del Transpacífico, que suman un 43% o 1,8 millones de TEUs de tráfico adicional. Las líneas entre Asia y el sur de Asia han sido, con diferencia, las que más han contribuido al aumento del comercio Norte-Sur, con 270.000 TEUs.
Es importante destacar que la concepción de que el tercer trimestre es el más fuerte no se ha cumplido en los dos últimos años, al menos teniendo en cuenta el tráfico en ambos sentidos. Los volúmenes han repuntado un 4% en el tercer trimestre, ligeramente por debajo del segundo trimestre, como ya ocurrió en 2016.
Algunos envíos que deberían haberse entregado en el tercer trimestre del pasado año fueron retrasados por la quiebra de Hanjin Shipping y entregados en los últimos meses del año, pero la consultora confiaba en que se restableciera la normalidad en 2017.
Es posible que las navieras esperaran que los volúmenes volvieran a aumentar en el último trimestre, lo que explicaría su reticencia a eliminar capacidad de las conexiones. El transporte marítimo vive, por tanto, un momento único desde el punto de vista de la demanda, pero existe el riesgo de que los beneficios se reduzcan si los operadores no son capaces de realizar una oferta acorde.
Fuente: Cadena de Suminstro
