Abogado de organizaciones que lograron sentencia de Corte Suprema advirtió que exigirá la clausura del recinto, mientras que VTP estima que no sera afectado por tratarse de un equipamiento portuario.
El fallo de la Corte Suprema que anuló el permiso de obras de Mall Barón 5 años después de haberse otorgado no solo aborta un proyecto que implicaba invertir US$ 200 millones y que fue lanzado hace mas de 10 años, pero que nunca se concretó. También amenaza alcanzar una edificación levantada cuando estaba vigente en Valparaíso el boom de los cruceros, y que demandó US$ 7 millones: el terminal de pasajeros VTP.
La razón es que ambos proyectos están amparados por la misma autorización 79 dictada en febrero de 2013 por la Dirección de Obras de Valparaíso. Así lo pretende hacer valer el abogado Rodrigo Avendaño, quien representa a organizaciones ciudadanas que lograron la sentencia del máximo tribunal. «El fallo también tiñe de ilegalidad al VTP y, como la misma sentencia aclara, no puede justificarse en derechos adquiridos. Por ello, se debe demoler, transformar o cambiar el uso», asevera. Avendaño dijo que exigirá al municipio la clausura inmediata del recinto. Algo que, en medio de la fuga de los cruceros a San Antonio, el municipio no ha realizado pese a que ya un informe de Contraloría estimó ilegal el permiso de VTP.
Pero Avendaño ahora esgrimió que el fallo de la Suprema debe ser ejecutoriado. Si ello no es acogido, adelantó que lo denunciará a la Contraloría. Fueron gestiones de la Empresa Portuaria de Valparaiso (EPV) las que permitieron en 2015 modificar el permiso 79 de modo que también autorizara el VTP sin tramitar uno nuevo, calificando al terminal de pasajeros y al Mall Barón como partes de un mismo conjunto armónico.
Fue inaugurado en 2016. «Construido al amparo del mismo permiso de obras, debería seguir igual destino que Mall Barón», señala el profesor de derecho administrativo de la PUCV, Martin Loo. «Pierde la recepción municipal, ya que tiene como antecedente un permiso de obras que deja de existir. Esto lo digo a priori ya que debe ser estudiado. No se trata de un proyecto, sino una realidad. El municipio deberá resolverlo viendo el modo de causar el menor daño», dice.
El gerente de VTP, Juan Francisco Bilbao, señaló que ha conversado el tema con el alcalde de Valparaiso, Jorge Sharp, pero que este le ha tranquilizado. El recinto, que no entró al sistema de evaluación de impacto ambiental y es usado como centro de convenciones, «no tendría ningún inconveniente porque al finales un equipamiento portuario y ni siquiera requiere permiso de construcción».
La Corte de Valparaíso tramita un reclamo de ilegalidad interpuesto por el mismo abogado Avendaño contra la recepción de obras de VTP. Allí, el municipio se allanó al reclamo, pero Bilbao descartó que ello le inquiete pues le explicaron que ello apuntaba en realidad contra el Mall Barón, con el que comparte permiso, pero no contra el VTP «que no daña a nadie y es un aporte».
Consultado sobre el efecto que el fallo de la Corte Suprema tendría en el VTP, Sharp comentó escuetamente que «es un problema que tendrán que resolverlo los abogados».
Fuente: El Mercurio