A 40 metros de profundidad y con un diámetro de 2,5 metros quedó fundado el primer pilote instalado en el canal de Chacao para la construcción del puente que conectará la Isla Grande de Chiloé con el continente.
Quedó apoyado sobre la Roca Remolino, una elevación en el fondo marino del canal, que en la práctica permitió el diseño de la megaestructura, un puente colgante soportado por tres pilas.
Será una prueba, previo a la instalación de los 36 definitivos que irán contenidos en un dado de amarre de 59 m por 43 m, en una estructura de 9 m de espesor. El director nacional de Vialidad del MOP, Walter Brüning, explicó que en paralelo se está terminando la construcción de la planta cementera que en medio del canal abastecerá la obra.
Fuente: El Mercurio