La construcción de un muelle flotante, con un costo de US$ 1 millón, para satisfacer la demanda de servicios por parte de la industria salmonera y que se complementará al futuro puerto, refleja que en Puerto Natales no sólo se quiere vivir del turismo o la ganadería.
Porque la capital de Última Esperanza, cuyos 21.700 habitantes celebraron hace unos días los 107 años de la comuna, proyecta su desarrollo también en la salmonicultura y pesca artesanal. Por eso la Empresa Portuaria Austral decidió invertir en un muelle flotante para responder a las necesidades de las empresas de servicios a los centros de cultivo salmonídeo.
«La industria salmonera está predominando en Puerto Natales y hoy es complicado atender a esta y al ferry en el mismo terminal, por eso necesitamos construir el muelle flotante», explicó Patricia López, gerente de la EPA, quien dice que las obras se licitarán en el último trimestre para que se ejecute en el primer semestre de 2019.
Este muelle se complementará a la futura construcción de otro de tipo multipropósito que servirá para atender a naves de carga y de turismo.
El alcalde Fernando Paredes opina que proyectar un muelle flotante es reaccionar a una necesidad que deriva del desarrollo que experimenta la comuna. «Uno como alcalde claramente debe verlo como una oportunidad y visión muy positiva en el hecho que no todo esté centrado en el turismo. Si el tema salmonero viene a potenciar la actividad económica de la ciudad, bienvenido sea», dijo, agregando que perfectamente pueden convivir el turismo con la salmonicultura.
Drago Covacich, presidente de la Asociación de Productores de Salmones en Magallanes, confirma el atractivo de la provincia para esa industria, afirmando que «se proyecta una planta de proceso donde se genera un buen volumen de faenas y empleos».
254 km es la distancia que separa a Puerto Natales de Punta Arenas, la capital regional.
Fuente: El Mercurio