El cierre de la fábrica de contenedores refrigerados de Maersk Container Industry (MCI) en San Antonio, no es indicio alguno de lo que podría pasar con la actividad naviera en Chile del grupo danés.
Así lo asegura Francisco Ulloa, director de Maersk Line para la costa oeste de Sudamérica, que incluye a Chile, Perú, Ecuador y Bolivia, quien afirma que están totalmente comprometidos con las operaciones en Chile, que se despliegan con movimiento de carga en siete puertos del país: Arica, Iquique, Antofagasta, Mejillones, San Antonio, Valparaíso y San Vicente.
«La parte naviera corre por un carril distinto y estamos 100% comprometidos con Chile y su desarrollo», sostiene Ulloa, quien ayer asistió a un foro de infraestructura organizado por el Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI).
Maersk tiene cerca del 30% del mercado naviero local y cuenta con 90 trabajadores en la parte administrativa. Pero el ejecutivo señala que el empleo indirecto que genera su actividad de transporte de contenedores «es enorme».
Francisco Ulloa recalca que la decisión de MCI de cerrar su planta está relacionada a razones de oferta y demanda, que no son las mismas del área naviera.
El gerente para Chile y la región indica que están operando dos servicios directos a Asia desde el país, además de tener conexiones con todo el mundo. Comenta que el flujo de carga está «bastante estable desde el punto de vista de la importación, sobre todo los retailers «.
Añade que en esta época comienza el periodo más fuerte de importaciones desde Asia, en específico a partir de julio, debido a que la mayoría de las empresas del comercio refuerzan sus stocks con miras a la demanda que se genera a fin de año. Las materias primas que salen desde nuestro país, como el cobre y las forestales, también están impulsando al rubro naviero.
Ulloa afirma que los puertos chilenos son eficientes, pero su preocupación está relacionada a si es suficiente la infraestructura para llegar con la carga a las diferentes ciudades. Estima que se deben abordar soluciones innovadoras y no solo ampliar carreteras, pues en algún momento igualmente pueden colapsar.
Retail
Las importaciones más fuertes del retail parten en julio, con miras a las ventas de fin de año.
Fuente: El Mercurio
