En nuestro país el transporte de carga sobredimensionada, es decir, la carga que supera el tamaño o peso de un contenedor normal, se encuentra en aumento sostenido. Desde proyectos mineros con maquinaria de gran envergadura como tolvas o camiones, pasando por la industria automotriz, hasta la importación de enormes paneles solares para las plantas de energía natural; toda esa carga que no tiene espacio en un contenedor normal debe llegar de igual forma a buen puerto, elemento en el que SeaLand a Maersk Company ha destacado, especialmente con las maquinarias nuevas, que representan el 55% del total de la carga sobredimensionada que mueve en la región.
“Creo que una de nuestras principales ventajas es el gran apoyo operacional y logístico que entregamos. Contamos con equipos multidisciplinarios al pendiente de estos proyectos,
incluyendo desde el personal experto apostado en todos los puertos de embarque para dar asesoría personalizada según negocio a los clientes, hasta la tecnología y los tipos de contenedores que entregamos. Llevamos trabajando duramente en esto desde hace ya un buen tiempo, sin embargo, empezamos a enfocarnos con más fuerza en este segmento desde comienzos de 2018, hasta el momento con gran éxito”, señala Ignacio Urzúa, gerente comercial de la intrarregional de Maersk.
SeaLand cuenta con un avanzado sistema de cotización en línea que permite al cliente concretar todo lo relacionado a su pedido en tan solo 24 horas, además de equipos y contenedores especiales para mover este tipo de carga. No obstante, según Urzúa uno de sus puntos más fuertes es la gran cobertura de puertos que ofrece para este tipo de proyectos en el país.
“Actualmente tenemos varios puertos habilitados para este tipo de carga, tanto para importación como exportación. Arica, Iquique, Mejillones, Antofagasta, Valparaíso, San Antonio y San Vicente.
En todos estamos continuamente trabajando en proyectos de carga sobredimensionada y podemos ofrecer una gran conexión con distintos orígenes o destinos en el continente”, asegura Urzúa. En este tipo de servicio, la carga que se traslade según puerto dependerá mucho del negocio típico de la zona, es así como por ejemplo en el norte del país se puede encontrar más movimiento de maquinaria minera o proyectos solares, mientras que en el centro se aprecia la llegada de vehículos de menor envergadura.
Por otra parte, a la hora del traslado de carga cuyo valor es extremadamente alto, la seguridad de los procedimientos es crucial y SeaLand así lo entiende. “Un punto importante es tener buena comunicación con los puertos de descarga y ser responsable para cumplir con todos los procedimientos, evitando así potenciales problemas tanto para el cliente como para nosotros del punto de vista operacional. Esta carga es siempre un desafío y las medidas a adoptar dependerán en gran parte de las características particulares de cada pieza, siendo el ancho, largo y peso de estas las principales características.”, afirma Urzúa, añadiendo que “en todos y cada uno de nuestros puertos de embarque y descarga tenemos sus capacidades mapeadas, por lo que al cotizar el servicio se están tomando todas estas variables en consideración, solo así se realiza un trabajo de excelencia”.
Sobre el futuro, desde SeaLand a Maersk Company esperan continuar su posicionamiento como la mejor opción en el transporte de carga sobredimensionada, entregando aún más valor al servicio.
“Esto tiene que ver con continuar simplificando procesos y generando confianza con nuestros clientes. Como empresa continuamos invirtiendo en soluciones tecnológicas que ayuden a nuestros clientes a hacer más fácil el transporte de esta carga, que requiere tantos procesos operativos, uniéndolo a un tiempo de tránsito rápido y una completa red de puertos en prácticamente todo América. Estamos seguros de que podemos seguir avanzando en la dirección correcta”, sentencia el ejecutivo.
