Más de 30 días completó la paralización de los trabajadores eventuales de de la empresa Terminal Pacífico Sur (TPS) -ligado a la familia Von Appen- y la administración de la compañía, que el viernes realizó una propuesta que nuevamente no fue aceptada, dándose por ello la continuidad a las movilizaciones, que se han prologado por 32 días.
Caída en el número de turnos que prestan los trabajadores eventuales en los terminales
Según explica TPS se debe a la menor actividad del puerto durante el año que termina, en el que la baja actividad económica y la fuerte competencia de San Antonio han impactado los volúmenes de carga transferida y consecuentemente la cantidad de turnos de trabajo.
Precarias condiciones de trabajo acusan los trabajadores. Su empleo es por turnos y se finiquita cada 8 horas. Por ello, no cuentan con una remuneración mínima, indemnización por años de servicio, vacaciones pagadas, o incluso, negociación colectiva, entre otros derechos.
Un bono compensatorio de $2 millones por la baja de turnos fueron las primeras demandas de los trabajadores eventuales de TPS, que los llevó a paralizar el pasado 16 de noviembre. Luego se sumó la instalación de una mesa para abordar condiciones laborales y de seguridad, un crédito blando de $500 mil y la no existencia de listas negras.
Se suman los de TCVAL
A la jornada siguiente de iniciada la paralización y bloqueo de TPS, se suman a las movilizaciones los trabajadores eventuales de Terminal Cerros de Valparaíso (TCVAL), quienes también agregan sus demandas internas, entre ellas un bono prometido por la empresa si se obtenía el RCA del proyecto Terminal 2. En dos días, el puerto queda paralizado y al menos 13 naves portacontenedores que debían recalar en Valparaíso fueron desviadas al Puerto de San Antonio. Entonces. se estimaron pérdidas por US$3,5 millones.
Fuerza mayor
Transcurridos 5 días, ambas empresas advirtieron a la Comisión para el Mercado Financiero que no podían cumplir con sus contratos de concesión debido a la suspensión de las operaciones portuarias al interior de los terminales. Esto, bajo el criterio de evento de fuerza mayor.
Gobierno interviene en conflicto. El 27 de noviembre, casi dos semanas después, los dirigentes sindicales de TPS y TCVAL se reunieron con la ministra de Transportes, Gloria Hutt. Trabajadores firmaron una carta de compromiso para fortalecer las instancias de diálogo entre todas las partes y además, en caso de llegar acuerdo en los próximos días, ser garante en el cumplimento de los puntos acordados.
Acuerdo en TCVAL
El 29 de noviembre los trabajadores eventuales aceptaron la propuesta de la concesionaria y bajaron la paralización. Según se informó, la concesionaria se comprometió a no generar listas negras o represalias en contra de los trabajadores que participaron de la movilización, a la generación de una mesa de trabajo para discutir condiciones laborales, un préstamo de $500 mil y un bono de $1 millón.
Operación parcial de TPS
Conflicto portuario gatilló la salida de Raúl Celis a la presidencia de Empresa Portuaria de Valparaíso (EPV) el 6 de diciembre, “por diferencias en la apreciación del conflicto” con el Gobierno Central. Esa semana, TPS restablece parcialmente las faenas. De hecho, recibió su primera nave desde la movilización.
El 12 de diciembre dio por finalizado el evento de fuerza mayor, pues los trabajadores pueden ingresar por sus propios medios a las oficinas e instalaciones del terminal.
Impacto financiero
TPS estimó que el impacto en sus resultados financieros producto del evento de fuerza mayor es del orden de US$2 millones. En tanto, EPV estima, hasta el momento, en US$4,2 millones las pérdidas para el puerto en términos de atención de naves. Las embarcaciones desviadas han llegado a 15.
Última oferta rechazada. El 14 de diciembre TPS ofreció a los trabajadores un préstamo de $350 mil y una gift card de $200 mil, además de un aguinaldo y una caja de mercadería. La oferta fue rechazada, tanto por los montos como por no garantizarles que no habrán “listas negras”, por lo cual el paro se mantiene.
Portuarios: “Vamos a tener un Año Nuevo con barricadas”
La advertencia sobre la festividad de fin de año se repitió. “No queremos arruinarle el Año Nuevo a nadie, pero tendremos un show nunca antes visto en Valparaíso, un Año Nuevo alternativo, con barricadas y protestas en la calle”, apuntó el vocero portuario, Pablo Klimpel.
Esto, alertó la vocera de la Cámara de Comercio, Marcela Pastenes, quien señaló que la movilización “está generando una sensación de inseguridad entre quienes tienen planificado visitarnos durante esta temporada”.
Este lunes las manifestaciones se trasladaron hasta el Tribunal de Garantía de Valparaíso, donde se acusó amenazas y lesiones leves en contra de Carabineros, al trabajador portuario Gustavo Olmos.
En tanto, el ministro de hacienda, Felipe Larraín, informó que las reuniones se han extendido entre trabajadores y el sector exportador y llamó a la responsabilidad. “Aquí está en juego que Chile sea un proveedor confiable y por tanto hay que entender que hay una responsabilidad más allá del conflicto, se debe intensificar el diálogo”, dijo.
Fuente: Pulso