El holding del grupo Luksic tuvo un incremento de 17,7% en sus utilidades, gracias al aporte de sus inversiones en la naviera alemana Hapag-Lloyd y la multinacional francesa Nexans.
Quiñenco, el brazo de inversiones del grupo Luksic, registró una ganancia neta de $247.247 millones en 2020, cifra que representó un incremento de 17,7% frente a 2019, impulsado principalmente por el desempeño de las compañías más globales en las que participa: la naviera alemana Hapag-Lloyd y la multinacional francesa Nexans.
Ello compensó, en parte, los menores resultados obtenidos por Banco de Chile, Enex y CCU, los que fueron impactados negativamente por la pandemia, particularmente durante el segundo trimestre.
El gerente general de la compañía, Francisco Pérez Mackenna, señaló que “más allá de estos resultados, reflejo de la estrategia de diversificación que hemos seguido, nos enorgullece el que nuestras empresas hayan sabido adaptarse a los tiempos que vivimos, dándole máxima prioridad a proteger la vida de sus trabajadores y a continuar con sus operaciones, para no afectar así la cadena de abastecimiento”.
En medio del impacto de las restricciones implementadas para contrarrestar la pandemia y de una volatilidad en el precio del petróleo, Hapag-Lloyd, principal activo de Compañía Sudamericana de Vapores (CSAV), registró en 2020 una baja de 1,6% en los volúmenes transportados.
Sin embargo, hacia fines de año experimentó una recuperación, impulsada por un repunte de la industria y de la actividad mundial, lo que llevó a la naviera a reportar una utilidad que alcanzó los US$1.058 millones.
En octubre Quiñenco participó con una inversión cercana a los US$219 millones en el aumento de capital convocado por CSAV, que le permitió alcanzar una participación de 61,76% en la propiedad de esa filial.
En el caso de Nexans, la empresa logró mitigar los efectos de la crisis mundial con planes de transformación y reducción de costos.
Así, si bien experimentó una caída orgánica de 8,6% en las ventas, la que afectó especialmente los segmentos industrial y construcción, la empresa tuvo menores costos de reestructuración en 2020 y una ganancia no recurrente por la desinversión de activos, lo que a diciembre la llevó a revertir las pérdidas de 2019, alcanzando una ganancia neta de 78 millones de euros.
Recientemente, la compañía anunció una estrategia destinada a focalizar sus actividades en cuatro sectores, poniendo en el centro la electrificación y su cadena de valor, desde la generación hasta la transmisión, distribución y uso de la energía.
En el segmento financiero, Banco de Chile redujo su utilidad en 21,9%, reflejando un alza en las provisiones por riesgo de crédito, incluyendo mayores provisiones como consecuencia del impacto del brote de Covid-19 y su efecto en la calidad crediticia, junto a una disminución de 3,8% en sus ingresos operacionales.
El resultado de Enex, en tanto, se contrajo un 68,4% por el impacto de la caída en el precio del petróleo y, fundamentalmente, de la menor afluencia de público en el canal de estaciones de servicio, debido a las restricciones a la movilidad por la crisis sanitaria.
Esto se vio reflejado en que los volúmenes totales despachados en 2020 disminuyeron un 13,6% respecto del año anterior.
Los resultados de CCU en el período, que disminuyeron un 26,1%, muestran el efecto de la crisis sobre las ocasiones de consumo en todos los países donde la empresa está presente, especialmente durante el segundo trimestre, señaló Quiñenco.
Además, la compañía enfrentó un impacto desfavorable por las devaluaciones de las monedas locales frente al dólar, tanto en Argentina como en Chile.
La excepción continuó siendo el segmento Vinos, con un mejor desempeño, basado en crecimiento en volúmenes y un impacto positivo del fortalecimiento del dólar. A pesar del complejo escenario, la compañía experimentó una recuperación durante el cuarto trimestre, al crecer un 10,6%, y cerró 2020 con un incremento de 2,2% en sus volúmenes consolidados.
Recientemente, junto a Heineken, Quiñenco incrementó su participación en CCU, tras la adquisición de una participación adicional de 1,56% a través de IRSA, controladora de esa filial.
Fuente: La Tercera