Enclave de D&C Group ha podido consolidar upgrade en su gestión, sumando nuevos clientes, renovando sus equipos y mejorando su infraestructura.
Importantes avances en el mejoramiento de su infraestructura y equipamiento, el afianzamiento de su gestión comercial y de su seguridad, así como la incorporación de nuevos talentos a su equipo, son parte de los hitos que el Terminal Antofagasta de D&C Group ha logrado durante estos últimos meses.
El operador logístico que desarrolla sus actividades en el sector conocido como La Negra, y que recientemente completó una década de presencia en la capital de la segunda región, ha tenido una intensa actividad este 2023, la cual se ha traducido en logros relevantes: la llegada de una decena de nuevos clientes, una ocupación que bordea el 100% de sus espacios de almacenamiento de carga e ingresos que le han permitido cerrar los primeros ocho meses del año con cifras azules.
“Hasta hace algunos años este terminal estaba con bajos volúmenes carga, con pocos clientes y tarifas poco competitivas. Se ha hecho un trabajo comercial y de gestión muy intenso, especialmente a partir de 2022, se han afianzado los equipos y se han cerrado importantes alianzas que nos han permitido un semestre y un año muy positivo en relación con cómo venía desarrollándose la actividad”, resumió Marcelo Cruz, gerente del terminal.
Un punto clave ha sido la apertura del Terminal Antofagasta de D&C Group a nuevas áreas y clientes que hasta 2021 no se habían explotado mayormente: actores del sector minero (como el productor de litio Albemarle), proveedores de esta industria, fabricantes de insumos industriales, importadores metalúrgicos, empresas del rubro energético y retail, entre otros, han sido incorporados en una renovada estrategia de atención a los clientes.
EQUIPOS E INVERSIONES
Como parte de este upgrade, el Terminal ha debido ajustar sus equipos a nuevos desafíos: un nuevo jefe de terminal, una nueva jefa de transporte y una ejecutiva customer service han sido posiciones claves que se han cubierto con profesionales locales, sumado a la promoción interna de los propios talentos en la firma, que se expresa en la movilidad de funciones y mejoras laborales a colaboradores que se han ido capacitando en el tiempo.
En paralelo, las transformaciones en la gestión gerencial que se impulsaron desde el nivel central de D&C Group, coincidieron con el ciclo transicional y ayudaron en este verdadero cambio cultural que ha permitido el crecimiento de este enclave antofagastino.
“Ha habido cambios en los liderazgos, la formación de nuevos equipos, que le dieron un empuje a la empresa y a este terminal, y nos han ayudado a llegar a proveedores y clientes que no conocíamos. También la Certificación Trinorma y el nuevo modelo de gerenciamiento ha permitido construir una base para hacer las cosas de forma distinta, tener procedimientos y pautas estandarizadas, empoderar y respaldar a los equipos. Este cambio cultural de la gestión conlleva dar un mejor servicio a los clientes”, añadió Cruz.
Junto a este cambio de gestión, la empresa ha invertido en seguridad, cambiando su cierre perimetral y sumando cámaras, incorporando tecnologías y un grupo electrógeno, además de nuevas grúas con mayor capacidad y una carpa-bodega de 1.000 metros cuadrados, que permita incrementar su capacidad de almacenaje y atención a sus clientes.
Finalmente, otro ámbito relevante lo constituyen las redes y alianzas que permitan a D&C Group posicionarse en la industria regional, como un operador logístico involucrado en los temas del desarrollo local.
De allí que, a inicios de este año el Terminal se incorporó a la Comunidad Portuaria de Antofagasta (COPA), donde poco a poco han podido consolidar su relación con la propia Empresa Portuaria y su concesionario ATI, otros operadores logísticos, navieras y otros actores relevantes del sector logístico-portuario. Próximamente, además, esperan participar de la Asociación de Industriales de Antofagasta, un gremio relevante también de la región.
“Ha sido muy bueno ser parte de COPA, establecer buenas relaciones con el puerto y sus actores, poder tener puentes para resolver inconvenientes, buscar soluciones en conjunto. También es oportunidad de estar informados sobre políticas e inversiones regionales,
así como aspectos que pueden afectar a nuestra industria; y compartir con otros operadores, saber que están haciendo y colaborar desde nuestra experiencia en mejorar la relación del sector logístico y del puerto con la comunidad”, evaluó Marcelo Cruz.
Marítimo Portuario Comunicaciones