Grúa destruida por el temporal tiene a Caleta Portales sin merluzas frescas

Brazos cruzados, cuellos doblados, miradas ga­chas, silbidos: no es cualquier día en Caleta Portales. Son 505 tra­bajadores -sumando 220 pescadores y 285 cirujanos o limpiadores, ade­más de vendedores y ensamblado­res- quienes resultaron afectados con las implacables marejadas que el sábado hicieron anicos la grúa hidráulica del muelle.

«La grúa es el corazón de noso­tros. Con ella podemos subir o bajar los bates cuando partimos o regresa­mos de la faena de pesca», cuenta Romualdo Gallardo, 34 años, 16 tra­bajando como pescador en la caleta, casado, tres hijos en el colegio. «Es un dolor muy grande el que estamos sintiendo. Hemos estado todos estos dias sin poder llevar plata para la Ca­sa», dice pasándose las Palmas de las manos sabre las rodillas.

Es un martes a las dos de la tarde en Valparaiso y la postal es inquie­tante: quienes trabajan alli no tienen merluza para vender. Sólo se comer­cializa lo que llega de Puerto Montt, como reinetas o salmones, y por lo tanto la explanada de la caleta figura casi vacía. Sólo se distinguen unos cuantos pescadores que deambulan alrededor de los botes. Hoy ni siquie­ra los gatos y pelícanos se asoman por este lugar.

«Ahora, donde no podemos salir a la mar, no hay merluza fresca en Val­paraíso», suma Manuel Perez, presi­dente del sindicato de pescadores de Caleta Portales. «Nosotros somos quienes les vendemos a todos: desde los vecinos que bajan de los cerros de Valparaíso hasta los dueños de res­taurantes en Concón y Viña del Mar».

-¿ y ahora que van a hacer?

-Se supone que esta semana nos van a prestar tres grúas eléctricas capaces de cargar hasta 3 toneladas. Con eso vamos a tener que salvar­nos. El otro problema que tenemos es el sistema eléctrico: son tres días lo que se van a demorar los técnicos en cambiar los cables que también quedaron destruidos. Sin eso no po­demos ocupar las máquinas que nos van a prestar.

-¿Como se destrozo la grúa, Manuel?

-El cabezal del muelle, donde es­taba operando, sucumbió el fin de se­mana con la fuerza de las alas. Fue la mar. La mar lo hizo pedazos.

Oscar Ruiz, 56 arias, casado, tres hijos, capataz de los limpiadores de pescados, se suma a la conversación: «La mar se llevó los puestos de limpieza. Dejó solo 9 de los 45 puestos», detalla. «Ahora no nos queda otra que levantar unos mesones de made­ra con la esperanza de que lleguen luego las grúas eléctricas. Y ojalá eso ocurra: hay muchas familias que ali­mentar».

Les costó $120 millones y tenía sólo 10 años

 Manuel Perez, presidente del sindicato de pescadores de Caleta Portales, prende un cigarro y luego, con un dejo de nostalgia, describe la bendita grúa de fierro que se destruyo el sábado: «Costaba $120 millones y tenia una capacidad de levantar 18 toneladas. No tengo idea de que marca y modelo era. Sólo se que la tenemos desde hace diez años, desde que se inauguró este muelle». Detalla que el precio de una docena de merluzas de tamaño menor, correspondiente al pescado que mas se vende en la caleta, parte en $2.000. Mientras que doce de un tamño mediano cuestan desde $4.000 para arriba. El precio por doce de estos bocados en tamano grande, a su vez, es de $8.000 hacia arriba. Al cierre de esta edicion, en el Mercado Cardonal de Valparaiso, los montos se mantenían similares.

Fuente: Las Últimas Noticias