Alcalde de Valparaíso define las compensaciones que solicitará al Estado por impacto del T2

Determinante fue el Concejo Municipal extraordinario que en la jornada de ayer se llevó a cabo en el Salón de Honor de la Municipalidad de Valparaíso, sesión que se centró exclusivamente en el análisis del estado de avance de los proyectos que la Empresa Puerto Valparaíso (EPV) busca desarrollar en el borde costero de la ciudad.

Con la reunión protagonizada en el Palacio de La Moneda por el intendente regional, Gabriel Aldoney; el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Andrés Gómez-Lobo; y el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, aún en la retina, el alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, dio inicio al Concejo porteño para exponer ante los ediles presentes cuáles deben ser, según su opinión, las compensaciones que el municipio debe solicitar por el daño «irreversible» que el proyecto Terminal 2 generará en el borde costero de la ciudad.

Estas ideas, según la máxima autoridad municipal, deben representar «el faro de Valparaíso para los próximos años».

Estudio ambiental

Así, el primero en tomar la palabra fue Miguel Dueñas, director del Departamento de Asesoría Urbana, quien explicó los principales alcances del Estudio de Impacto Ambiental que el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) ha propiciado por el T2, trámite en el cual el municipio solicitó sus propias compensaciones a la empresa concesionaria, Terminal Cerros de Valparaíso (TCVAL).

«Nosotros en mayo del 2016 presentamos nuestras propias observaciones al proyecto, las cuales deben ser respondidas el próximo 13 de septiembre por parte de TCVAL. En este sentido, entre las observaciones del informe remitido por la municipalidad hay dos tipos de conclusiones: acerca de las mitigaciones y de las compensaciones, y en cuanto a las últimas, que son prácticamente un «cobro» por la afectación que tendrán los proyectos en la ciudad, se ha pedido a TCVAL que incorpore una serie de proyectos a nivel urbano afuera del sitio, los cuales deben tener relación con una nueva infraestructura en miradores y ascensores, por ejemplo», precisó Dueñas.

Compensaciones por t2

Una vez aclarados los pormenores del Estudio de Impacto Ambiental, el alcalde porteño, Jorge Castro, entró al área chica del tema para exponer cuáles deben ser, según su planteamiento, las compensaciones que el Estado de Chile debe ejecutar en Valparaíso debido al daño que el proyecto T2 provocará en la Ciudad Puerto.

«Estas compensaciones van a ser el verdadero faro del siglo XXI para la ciudad de Valparaíso. Si no pudimos con la Ley de Puertos, entonces ahora vamos a poder con este estudio de Impacto Patrimonial que permitirá llegar a compensaciones como, por ejemplo, una zona franca cultural, para que los turistas puedan comprar productos regionales, como el vino, los aceites de oliva y los pasteles de La Ligua, totalmente libre de impuestos», explicó el alcalde porteño.

En esta línea, Castro explicó que además solicitarán como compensaciones la construcción de un nuevo hospital en Valparaíso, que el Ministerio de Obras Públicas (MOP) entregue el estudio de prefactibilidad para el proyecto de teleférico y 900 UF de subsidio patrimonial para toda la ciudad y no centrado exclusivamente en la zona azotada por el megaincendio de abril del 2014.

«La totalidad de las compensaciones serán expuestas ante el Concejo municipal en aproximadamente 15 días más, para que sean analizadas por los ediles, para así posteriormente debatirlas con el intendente regional, Gabriel Aldoney», puntualizó la máxima autoridad municipal.

Ante este escenario, la interrogante que surge es: ¿La compra del Palacio Subercaseaux por parte de EPV es parte del paquete de compensaciones?, pregunta que Jorge Castro respondió enfáticamente, argumentando que «el Palacio no está dentro del marco de las medidas de compensación, pues ese es un impulso al Barrio Puerto que era necesario, y que no tiene relación con el tema del impacto que tendrá el T2 en la ciudad».

Finalmente, y sobre la conformación de la corporación público-privada que rescate el patrimonio de Valparaíso, el jefe comunal agregó que «esa es una instancia que debe estar en el presupuesto de la nación a través de una ley de la República, pues somos la única ciudad Patrimonio de la Humanidad que tiene Chile y queremos que eso se concrete, y no vamos a dar un paso atrás respecto a las cosas que le pertenecen a Valparaíso. Tenemos un concesionario, el Estado de Chile, que por 480 años le ha sacado recursos a la ciudad y ahora nosotros le estamos diciendo que queremos recuperar nuestro patrimonio y que se haga responsable de lo que él mismo fue a buscar a la Unesco, que fue hacernos Patrimonio de la Humanidad».

Opinión de concejales

Por su parte, una opinión sumamente crítica es la que expuso la concejala Paula Quintana (PS) una vez terminada la sesión extraordinaria del Concejo porteño, poniendo en tela de juicio el rol que la municipalidad ha tenido en la toma de decisiones en relación a los proyectos el borde costero.

«Los proyectos del borde costero son tan estratégicos para la ciudad que van a impactar en su desarrollo al menos para los próximos 50 años; y por lo tanto, la ciudad no puede quedar ausente respecto a las decisiones que allí se tomen, y creo que ha estado ausente, pues desde la municipalidad no se ha logrado ejercer el rol de liderazgo y de representación», precisó Quintana.

Cercana a los movimientos ciudadanos, la edil del PS siempre ha expuesto que el rol de la ciudadanía debe ser fundamental en cada decisión que se tome en temas tan trascendentales como son los proyectos portuarios, situación que, según su opinión, en esta ocasión no se tomó en consideración.

«La municipalidad no ha tenido el peso suficiente para mantener una postura de ciudad y eso va en desmedro de los porteños, pues la ciudad debe estar representada en las grandes decisiones y no ha sido así. Además, la participación del Concejo ha sido inhibida y tampoco se ha realizado un llamado a la participación ciudadana», agregó Quintana.

Opinión que fue compartida por el edil Iván Vuskovic (PC), quien añadió que «cada decisión que la municipalidad tome con respecto al borde costero debe ser consultada a la ciudadanía, pues no puede ser que el municipio no consulte a nadie qué es lo mejor para la ciudad».

En este punto, Vuskovic centró su atención en la creación de la corporación público-privada, la cual, de acuerdo a su análisis, «aún no está definida, pues pareciera que el intendente quiere hacer una cosa y el alcalde otra, y esas diferencias no pueden darse».

Fuente: El Mercurio de Valparaíso