Según agentes del mercado, la actividad local recibirá de todas formas un impulso este año desde el sector externo.
A pesar de que el Banco Central reconoció abiertamente en su Informe de Política Monetaria (Ipom) recientemente publicado, que “las consecuencias que puedan provocar las medidas proteccionistas en materia de política comercial impulsadas por la administración de EE.UU. (…) podrían tener consecuencias negativas para el comercio mundial y el crecimiento tendencial a nivel global, especialmente en economías pequeñas y abiertas como la chilena”, a juicio de los expertos, las medidas sancionatorias anunciadas ayer por el presidente Trump a China, todavía no serían de la magnitud relevante como para frustrar el impulso positivo que se espera del sector externo para la actividad chilena este año.
Según Alejandro Fernández, economista de Gemines, “el efecto en el corto plazo de esto sobre la actividad económica es marginal. Evidentemente es un escenario que tiene un potencial mayor, de mayor riesgo, pero incluso en el peor escenario es muy difícil ver un impacto importante al menos en un par de años”.
Por ello, enfatizó que “de todas maneras seguirá siendo un impulso positivo el que reciba la economía chilena desde el exterior durante este año. Hay otros riesgos, asociados a temas más financieros, por ejemplo con el alza de la tasa Libor, pero esto no”.
Comparte Joseph Ramos, economista de la U. de Chile: “A menos que este hecho dé lugar a otras situaciones similares, y eso a otras, solo afectará a EE.UU. y China en torno a una o dos décimas, con lo que el efecto para Chile sería mucho menor. Esto efectivamente genera un ruido a nivel global y, obviamente, habrá sectores más afectados, pero no impacta la reactivación”.
Fuente: Pulso