El viernes pasado la ministra de Transportes, Gloria Hutt, reafirmaba, tras una reunión con el presidente del directorio de la EPV, Raúl Celis, la elaboración de un plan destinado a mejorar la relación entre la ciudad y el puerto, aplicable a todos los enclaves estatales del país.
Junto con ello añadió que, en específico, el encuentro con el exintendente se focalizó en «la promoción de una relación más armónica entre el puerto y la ciudad de Valparaíso, aspecto fundamental para nuestra administración que permite garantizar el desarrollo adecuado de la actividad portuaria en el mediano y largo plazo».
Y un buen punto de partida para esto puede ser hoy cuando el titular del directorio de EPV reciba la visita del alcalde porteño, Jorge Sharp, una cita esperada dado los conocidos reparos del municipio frente al actual proyecto de expansión del Terminal Dos, aunque también hay coincidencias, como la necesidad de construir un muelle exclusivo para pasajeros.
«Queremos hablar sobre el desarrollo portuario de Valparaíso para conocer la visión del presidente de la EPV respecto a múltiples proyectos vinculados al futuro del borde costero y también poder construir los espacios de diálogo que más allá de los prejuicios y las caricaturas nos puedan hacer dialogar en torno al interés común que tenemos que es el desarrollo de la ciudad», remarcó el jefe comunal frente a una visita que más allá de que tenga un carácter protocolar -con todo lo que ello implica-, es clave al ser el primer encuentro formal entre el alcalde porteño y la nueva administración de la estatal.
«El diálogo lo que nos va a permitir es conocer precisamente cuáles son las visiones que existen en materia de desarrollo portuario de parte del nuevo directorio de la EPV, pues son autoridades distintas. Y antes de poder opinar sobre las posibles diferencias, me parece que es importante contar con la visión del nuevo presidente», comentó Sharp, quien destacó los temas donde existe una mirada compartida, como la necesidad de levantar una infraestructura dedicada a las naves de pasajeros.
«Creo que tenemos puntos en común, como por ejemplo, la necesidad de impulsar en el menor tiempo posible la construcción de un muelle exclusivo para el atraque de cruceros, que es una industria que genera un punto de encuentro, tanto en el turismo como en el desarrollo portuario, y creo que ambos tenemos una voluntad de avanzar en esa dirección. Y por lo mismo, espero que sea una reunión que nos pueda ordenar el trabajo a futuro que podemos tener entre la EPV y la Municipalidad de Valparaíso», enfatizó.
En cuanto a su postura frente al crecimiento de la actividad portuaria, recalcó que la conversación con la estatal debe ser en torno a un elemento que para el municipio resulta fundamental.
«Tiene que ver con cómo el desarrollo portuario se desarrolla, se trabaja y se articula de forma armónica con el desarrollo urbano de la ciudad de Valparaíso, pues naturalmente, y lo tenemos muy claro, la identidad primaria de nuestra ciudad es portuaria y eso nadie lo puede negar. Sin embargo, nosotros creemos que ese desarrollo portuario no puede ser a cualquier costo», dijo el jefe comunal, subrayando que ello debe dar lugar a un debate que no esté dominado por «la sobreideología o la politización, sino que más bien por cómo ponemos por delante el interés de la ciudad. Y nosotros, en ese sentido, el diálogo que queremos tener con la EPV es de una agenda sin exclusiones para hablar de todos los temas, los más complejos y también donde tenemos puntos en común, pues creo que esa es nuestra responsabilidad como municipio de Valparaíso».
En tanto, en el sector portuario la elaboración de un plan para mejorar y armonizar la relación entre la ciudad y el puerto, planteado por el Gobierno, fue bien recibida por distintos actores.
«Es algo por lo que nosotros hemos estado bregando desde que existe Asonave; y es que especialmente los gobiernos comunales deben participar activamente de común acuerdo con las empresas portuarias, porque estas últimas están insertas en la ciudad y, por lo tanto, tienen que ver mucho con ella», sentenció el vicepresidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Agentes de Nave (Asonave), Carlos Manterola.
En esa línea, el personero agregó que «parece ilógico que, a pesar de que la propia ley establece que debe haber una participación de las municipalidades, todavía no se han generado las instancias que permitan cumplir con la legislación. Ojalá que se cumpla esta meta».
En cuanto a la necesidad de generar espacios de encuentros, como lo señaló la secretaria de Estado, el ejecutivo apuntó que es el camino adecuado. «El diálogo debe primar en todo y ojalá que estas decisiones que hay que tomar, como por ejemplo las que tienen que ver con los terrenos portuarios, se hagan con diálogo. Nosotros estamos plenamente de acuerdo con lo que ella señala», sostuvo, añadiendo que fue uno de los aspectos que también trataron con la ministra.
«Fue uno de los temas que nosotros le planteamos cuando hablamos con ella como gremio (…), que había que buscar soluciones a los problemas que tienen la ciudades puerto a través del consenso y el diálogo que debe primar entre la gente que piensa con cordura las cosas. Y en esa línea, lo que señala ella representa un gran paso».
Para el gerente general de la Asociación Nacional de Armadores (ANA), Ricardo Tejada, el planteamiento es totalmente necesario y acorde a lo que se requiere. «Estoy totalmente de acuerdo, hay que sensibilizar a la ciudad de los beneficios que entrega un puerto y, por otro lado, escuchar cuáles son sus dudas, las que creo van por el lado del desconocimiento», aseveró.
Desde ese punto de vista, considera que una mayor participación mejoraría la relación entre ciudad y puerto, con todo lo que ello implica, para poder avanzar en materia de infraestructura, por ejemplo.
«Eso es lo que falta, comunicación y voluntad entre las partes. Los puertos no son los malos de la película. Hay que saber que hacen y sus beneficios, pero no exigirles que inviertan en lo que nos les corresponde a cambio de aprobar sus estudios ambientales. Creo que también hay un aprovechamiento de algunos sectores», puntualizó.
«La interacción de los puertos, con los municipios y la comunidad organizada es necesaria para entender las preocupaciones de los distintos actores. Conociéndose es factible crear un desarrollo de las ciudades armónico y sostenible, garantizando la vocación portuaria de la ciudad y manteniendo, o mejor dicho mejorando, la calidad de vida de los habitantes», comentó Fernando Aguirre, gerente general de la Cámara Marítimo y Portuaria de Chile (Camport).
Desde la academia, el director de la carrera de Ingeniería en Transporte Marítimo de la UNAB, Caupolicán Guerra, puntualizó que el tema planteado por la secretaria de Estado es relevante «porque ha tenido estancado el desarrollo y es el que de alguna forma ha impedido que muchos proyectos se desarrollen a tiempo porque priman todos estos intereses sectoriales que hay».
Agregó que si se hace hincapié en este aspecto es «porque está muy bien informada y de esta manera llama a lograr cierta armonía entre los intereses de los privados en todo el contexto portuario y todas las entidades que defienden temas ambientales y patrimoniales (…) El tema es que no se llega a ningún acuerdo y se dejan de lado proyectos importantes».
Asimismo, remarca que si no hay una voluntad abierta de dialogar y analizar en profundidad estos temas, es difícil pensar en que lo que se requiere hacer se logre a un corto plazo. «Siempre las posiciones son muy lejanas; entonces, ello impide que se analice a fondo cuáles son los intereses a proteger y priorizar».
UNA INSTANCIA PERMANENTE
Para el académico Caupolicán Guerra, se requiere una entidad inclusiva que permita ir zanjando los temas y avanzar. «Todos los puertos deberían conformar de manera oficial y seria una mesa con la participación de los principales actores, que sea un comité permanente donde se centralicen todos los proyectos y propuestas para que sean analizados y ver qué es lo más conveniente (…), pero cuando se enfrascan en diferencias que son prácticamente insalvables, donde no se llega nunca a un punto de encuentro, es difícil y se genera, además, una imagen pésima pensando en futuras inversiones».
«El diálogo que queremos tener con la EPV es de una agenda sin exclusiones para hablar de todos los temas»
Jorge Sharp, Alcalde de Valparaíso»
«Eso es lo que falta, comunicación y voluntad entre las partes. Los puertos no son los malos de la película»
Ricardo Tejada, Gerente general de la ANA»
«Los gobiernos comunales deben participar activamente de común acuerdo con las empresas portuarias, porque estas están insertas en la ciudad»
Carlos Manterola, Vicepresidente ejecutivo de Asonave»
Fuente: El Mercurio de Valparaiso