Chile se alinea con Argentina y se suma a interés por recuperar dinamismo de Mercosur

Esto fue ratificado por la presidenta Bachelet en la cumbre anual del bloque que culminó ayer en Asunción, Paraguay.

Fundado en 1991 por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, el Mercado Común del Sur (Mercosur) es la quinta mayor economía a nivel mundial. De ahí la importancia de las palabras del nuevo presidente del vecino país, Mauricio Macri, quien recalcó su intención de volver a darle «vitalidad» al proceso de integración regional, opacado por conflictos internos a raíz de acciones que han sido consideradas como proteccionistas en términos de comercio internacional.

Para Chile, cualquier empuje que experimente la coalición es relevante. Nuestro país forma parte como Estado Asociado desde 1996 luego de la aprobación del Acuerdo de Complementación Económica N° 35 (ACE 35) y a 2014, el Mercosur es nuestro cuarto socio comercial, el quinto mercado más importante para las exportaciones chilenas y la cuarta fuente de productos importados. «Estamos interesados en continuar fortaleciendo el rol de Chile en su calidad de miembro asociado, en orden a avanzar en los desafíos comunes que tenemos en la región y donde Mercosur claramente es un aporte en este sentido», afirmó el director de Asuntos Económicos Bilaterales de la Direcon, Pablo Urria.

En este proceso, la propia presidenta de la República, Michelle Bachelet, participó ayer en la XLIX Cumbre Mercosur que se realizó en Asunción, oportunidad que Chile aprovechó para continuar la promoción de un diálogo entre la Alianza del Pacifico y el bloque liderado por Brasil y Argentina.

En esa línea, la mandataria anunció que el próximo año Chile asumirá la presidencia Pro Tempore de la Alianza del Pacífico y desde ahí se continuará impulsando una mayor cercanía con el Mercosur. «Es una cuestión estratégica», planteó. La razón, explica Urria, es evitar duplicidades y generar instancias «con valor agregado que fortalezcan nuestras agendas comunes, no solo en el plano político y comercial, sino que también en otros temas gravitantes, como migración, salud y educación»

Trabajo conjunto

Nuestro país actualmente tiene una agenda de trabajo muy fluida con el Mercosur, enfocado en las empresas de menor tamaño. «Dada la cercanía geográfica y cultural, para Chile este bloque resulta muy atractivo, especialmente para las pequeñas y medianas empresas (Pyme) exportadoras» dice Urria, al tiempo que recuerda que la estrategia de promoción de ProChile apunta a fortalecer ese vínculo.

En esta materia, el ejecutivo valora los avances alcanzados por el Comité de la Micro, Pequeñas y Medianas Empresas Chile-Mercosur, ya que ha permitido avances relacionados con la agenda de productividad innovación y crecimiento, especialmente en medidas que apuntan a un desarrollo integral de estas compañías y a la búsqueda de potenciales exportadores. ¿El foco? Simplificar los trámites, ampliar la capacitación y asistencia técnica e incentivar el intercambio comercial entre pequeñas empresas de ambas partes.

El comercio entre Chile y el bloque no ha estado exento de polémicas, pero también se ha progresado en ello. Urria destaca que «prontamente» se pondrá en vigencia el Reglamento de Solución de Controversias (57° Protocolo Adicional), que establece el marco jurídico para resolver aquellas diferencias que pudiesen surgir entre las partes. «Asimismo, en materia de reglas de origen, suscribimos un anexo que amplía y profundiza los beneficios derivados del ACE 35, con la simplificación de las reglas de origen específicas», agrega.

El intercambio

En los últimos diez años, los envíos chilenos al Mercosur han crecido 116%, alcanzando en 2014 los US$ 5.748 millones, de los cuales el 61% correspondió a productos asociados a la industria, 34% a la minería y 5% al sector silvoagropecuario y pesca. Destacan los productos derivados del cobre (cátodos, minerales y concentrados), salmones y minerales no metálicos (cloruro de potasio). En las importaciones se observa un incremento de 7% desde 2005 a 2014, cuando se sumaron US$ 9.480 millones.

Fuente: Diario Financiero