El gobierno chino informó que reducirá los aranceles de importación sobre 1.585 productos industriales y textiles a partir del 1 de noviembre, como respuesta al ataque comercial de Estados Unidos. El primer ministro Li Keqiang dijo que con esta medida espera reducir el costo en 60.000 millones de yuanes -US$ 8.700 millones- al año para familias y empresas. Ante la imposibilidad de igualar los últimos aranceles aplicados por la administración Trump, Beijing optó por aplicarlos de forma inversa, anunciando un recorte a las tasas de importaciones de un 9,8% a 7,5% para maquinaria, productos eléctricos y textiles.
Según el Consejo de Estado, China hará «más esfuerzos» para alentar la inversión extranjera, con procedimientos de aprobación más rápidos. La idea es crear un entorno de inversión para las empresas externas que sea más justo, conveniente y predecible, en un momento en que el país intenta expandir la demanda interna ante la guerra comercial.
Aunque no se ha confirmado aún, esta medida dejará fuera a los productos estadounidenses sobre los cuales China ha impuesto aranceles.
Fuente El Mercurio