Cierre de uno de los galpones de ATI destaca en primera evaluación del APL

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El cierre del Sistema de Acopio de Concentrado (SAC) de la empresa Antofagasta Terminal Internacional (ATI), es hasta ahora uno de los avances más concretos conseguidos por medio del Acuerdo de Producción Limpia (APL), firmado el 9 de septiembre del año pasado.

A este compromiso voluntario, cuyo garante es la Asociación de Industriales de Antofagasta (AIA), adhirieron Sierra Gorda SCM, FCAB, EPA, ATI, el Complejo Metalúrgico Altonorte S.A., Codelco y el sector público, integrado por las seremis de Economía, Minería, Transporte, Salud y Medio Ambiente, junto a la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático.

El acuerdo busca elevar los estándares de las operaciones minero-portuarias, de manera de evitar impactos negativos en la ciudad.

La iniciativa alcanza ya un 54% de cumplimiento y su plazo máximo de implementación es de 24 meses, es decir, la totalidad de las medidas comprometidas deben estar implementadas en septiembre de 2018.

Galpón

Según explicaron ayer desde ATI, el SAC -que es uno de los dos galpones antiguos construidos en el puerto- dejó de operar a mediados de 2016 para uso de concentrados minerales, cumpliendo anticipadamente con el compromiso de esta acción establecido en el APL.

«Se trata de un cierre definitivo asociado a la operación de concentrados minerales, no así para buscar otro tipo de cargas», argumentaron.

Además del cierre del SAC, y siempre en el marco del APL, se avanzó en la implementación de un nuevo sistema de carga de concentrados mineros, el cual consiste en el uso contenedores de volteo (que se descargan dentro de la bodega del barco), minizando así las emisiones al ambiente.

Para el uso de estos contenedores volteables, ATI incorporó en agosto de 2015 grúas especiales llamadas «spreaders».

Cristian Wulf, gerente general de ATI, indicó que varias de las acciones comprometidas en el acuerdo están ya 100% implementadas.

«Estas (acciones) abordan, además del control, la limpieza de los camiones y los vagones, otro tipo de tecnología como son los contenedores volteables, y con respecto a eso ya tenemos todas las condiciones (…) para poder empezar a operar de esa manera», expresó.

Wulf informó que posteriormente se proyecta el cierre del TEGM (Terminal de Embarque de Graneles Minerales), que es otro de los compromisos adquiridos por la concesionaria.

Camiones

Entre los desafíos relevantes del APL también está terminar con el uso de camiones encarpados para el traslado de los concentrados mineros.

Sobre el tema, el seremi de Transportes, Waldo Valderrama, informó que en un plazo de 12 meses desde firmado el compromiso, esto es, en septiembre de este año, el 50% de los camiones que ingresan al puerto con concentrados deberán usar el método rotainer (contenedores sellados), mientras que en 24 meses la totalidad de la carga deberá moverse en estos depósitos sellados.

«EPA comenzó con la compra (de los contenedores) antes de firmar el acuerdo, por lo cual hay un buen avance. Ahora hay que esperar la auditoría para saber la cantidad exacta de toneladas de concentrado que se trasladan por medio de este sistema», dijo Valderrama.

Marcelo Campos, gerente de operaciones ferroviarias de FCAB, informó que actualmente operan con 100 vagones herméticos para concentrados.

«Nuestro foco y compromiso está principalmente en el transporte de concentrado de manera segura y confiable, sin impactar a las comunidades ni a la gente que opera con nosotros. Estos carros apuntan a tener un transporte de concentrado de manera hermética y segura», argumentó.

Ricardo Muñoz, jefe del Centro de Desarrollo Empresarial de la AIA, dijo que el porcentaje de avance del APL (54%) tiene que ver con que las empresas han estado trabajando para mejorar sus técnicas de transporte, acopio, embarque y desembarque de concentrados mineros a granel.

Por su parte, la seremi de Economía, Gabriela Gómez, destacó la importancia de este acuerdo, el cual «viene a responder a una inquietud de la comunidad antofagastina, relacionada con las emisiones del concentrado de cobre.

Fuente: El Mercurio Antofagasta