Una encuesta realizada por Cadem, reveló que siete de cada diez chilenos tiene una negativa imagen de la Ley de Pesca y determinó que un 67% de los consultados, la calificó como «mala».Se trata de un estudio de opinión pública sobre la industria pesquera y ese cuerpo legal, donde además un 83% lo vincula al beneficio de las grandes empresas, no así de otros actores relevantes.
Es más, un 74% cree que perjudica a las pymes y otro 85% estima que los afectados son los pescadores artesanales.El análisis también permitió establecer que esa norma carece de legitimidad. Un 87% de los encuestados dijo que hubo irregularidades durante su tramitación legislativa, para favorecer intereses empresariales, por lo que un 78% sostiene que es necesario caducar las cuotas pesqueras asignadas a la industria mediante esta ley.
Sobre lo que debería considerar una futura modificación legal, los consultados destacaron la protección a la pesca artesanal (45%), terminar con la exclusividad de derechos de pesca para la industria (41%) y velar por la conservación y sostenibilidad de los recursos pesqueros (33%).El presidente de la Asociación de Pescadores Artesanales Demersales, Juan García, expuso que estos resultados están “bastante ajustados a la realidad” y resaltó que un 76 % de los encuestados dijo conocer la ley, lo que refleja que “la gente está empoderada del tema”.
Sobre la baja valoración de la pesca industrial, García opinó que “cuando se habla de una ley sustentable con (pesca de) arrastre, va contra todos los principios. Estamos hablando del cuidado de los recursos, pero no se regula los artes de pesca, que es lo primero”.
Atribuyó la posición de los encuestados a “una lectura de muchos años”, dijo. Explicó que la flota pesquera artesanal “es de subsistencia. Se pesca para vivir y hay un tremendo cuidado y preservación de los recursos, que no es lo mismo que la industria, cuyo arte es altamente depredativo.
Eso permite esta afinidad de la gente con el sector artesanal”.Mientras que Zoila Bustamante, presidenta de la Conapach, dijo que “nuestra posición va de la mano de todas aquellas transformaciones a la ley que devuelvan derechos a los pescadores artesanales, como el fin al arrastre, no a la pesca internacional al interior de la Zona Económica Exclusiva (ZEE), el rechazo a las licitaciones y entrega de cuotas a las Pymes, que no son armadores y que compran a los artesanales; y, por último, reineta y jibia 100% artesanal”.
Fuente: Soy Puerto Montt/ Visión Acuícola