Un verano caluroso y lluvias intermitentes complicaron la última parte del período productivo. En congelados, se espera una baja de US$ 6,5 millones en retornos.
A principios de este año, en el sector frutícola proyectaban que una de las especies de exportación más beneficiadas con el alza del dólar serían los arándanos. Sin embargo, condicionaban este éxito a un clima que fuera un aliado más que un enemigo en el período productivo. Sin embargo, finalmente una primavera lluviosa y un verano caluroso causaron fuertes impactos en este sector. Al inicio de la temporada, el Comité de Arándanos de Chile había proyectado embarques sobre las 100 mil toneladas, cifra que tuvieron que ir ajustando a lo largo del lapso 2015-2016.
Finalmente, la temporada concluyó sin llegar a los volúmenes estimados, alcanzando un poco más de 91 mil toneladas, según el informe de este Comité. Esta cifra fue muy similar a la de la temporada 2014-2015, con lo que se estancó el crecimiento que habían tenido las exportaciones de esta fruta.
La entidad explicó que este menor volumen obedeció a temperaturas más bajas que retrasaron las cosechas y afectaron la producción; y también al efecto que tiene en el mercado estadounidense -que representa cerca del 70% de los envíos de arándanos chilenos- la fumigación por lobesia botrana (polilla del racimo de la vid). Esto implicó que aumentaran los envíos de arándanos orgánicos a ese mercado en desmedro de los convencionales.
Juan Carlos Domínguez, gerente comercial corporativo de la exportadora SBGroup, aseguró que la temporada tuvo tres etapas. La primera fue muy buena por altos precios, porque estaba atrasada y había menos oferta, explicó. Además, destacó que en la primera fase hubo baja producción en Argentina, lo que permitió que Chile llegara prácticamente solo a los mercados. La segunda etapa -entre mitad de noviembre y diciembre- estuvo con altos volúmenes y precios competitivos. No obstante, los problemas aparecieron en la tercera parte de la temporada, cuando se exhibieron bajos precios, demanda lenta y mucha concentración de cosecha, aseguró. Añadió que estos factores afectaron los valores y la rotación de los productos en los mercados.
El presidente de Fedefruta, Ramón Achurra, señaló que entre diciembre y enero esta fruta tuvo buenos desempeños, pero que se vio golpeada con las lluvias, afectando esto a la parte comercial.
Fruta congelada
En el caso de los arándanos congelados, los precios estuvieron mejores, pero los volúmenes también se vieron afectados. Juan Miguel Ovalle, gerente general de Frutícola Olmué, sostuvo que según las cifras del primer trimestre de 2016 de congelados disponibles, se exhiben bajas de 6% en valor y de 15% en volumen comparado con el mismo período del año pasado. «Eso tiene implícito un mejor precio promedio debido a la menor oferta», comentó.
No obstante, el mayor valor pagado y el alza del dólar no logran compensar la disminución en volumen. Ovalle explicó que este año a nivel de industria se van a exportar US$ 6,5 millones menos de arándanos congelados y una baja de 4.250 toneladas en volumen, según las estimaciones que manejan.
Crecimiento de los berries
En la temporada anterior, las exportaciones de arándanos crecieron 22%, mientras que este año se estancaron.
Fuente: El Mercurio
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