“Son un verdadero espectáculo ver estos barcos y más encima algunos comerciantes locales se benefician”.
Así comentaba Roberto Manríquez, residente de la parte alta de Coquimbo, la llegada de crucero Zaandam, nave de bandera holandesa que se transformó en la primera en recalar en la IV Región, dando inicio además a la temporada 2018-2019 a lo largo del país.
Con sus 1.440 pasajeros y 647 tripulantes, el Zaandam es solo el puntapié para los 34 mil visitantes que recibirá Coquimbo los próximos meses, lo que entusiasma a los actores turísticos de la zona, puesto que los turistas alcanzan atractivos como la Cruz del Tercer Milenio en el puerto y el Faro de La Serena, además del extenso borde costero de ambas comunas, incluso el valle de Elqui.
Según la Gerenta de la Corporación de Turismo de Coquimbo, Antonieta Neira, “contaremos con la segunda versión del Mercadito Kokimpu, la Ruta del Carpintero Inglés y Wifi gratuito en las plazas y a ellas se suman charlas sobre el próximo eclipse total de sol (en 2019)”.
Y es que la industria también entrega una proyección positiva para esta temporada. Enrique Runin, presidente de la Corporación de Puertos del Cono Sur sostiene que arribará un 20% más de pasajeros que el lapso anterior y un 18% más de naves que la temporada 2017-2018.
“Significa que las líneas mantienen a Chile como destino importante en Sudamérica y los puertos han ido haciendo mejoras en sus respectivos lugares”, precisó.
Runin coincide con las autoridades de Coquimbo, en el sentido de ciertas “señales” desde el Ejecutivo, específicamente con la la Ley de Cabotaje en el Congreso, iniciativa legislativa que facilitará la recalada de estas embarcaciones de lujo.
El Seremi de Economía de la IV Región, Luis Arjona, indicó que “gracias a esta ley las empresas podrán ofrecer paquetes turísticos de hasta siete días de duración, que es el tiempo requerido por los cruceristas para conocer y disfrutar nuestras experiencias y servicios turísticos. Todo esto significará fomentar el empleo y las economías locales”, sentenció.
Fuente: La Tercera