Este fin de semana se realizó la consulta ciudadana para definir cómo se remodelará el Muelle Barón, en Valparaíso. La opción C, «Parque Barón», fue la ganadora con 5.450 preferencias (48%), de un total de 11.344 votos.
La iniciativa considera, entre otras cosas, construir un acuario, un humedal, paseos y una pasarela que conecte la avenida Argentina con el muelle.
Sin embargo, luego de que se conociera el proyecto ganador, arquitectos acusaron que este fue promovido por redes sociales y que se identificó parcialmente a los autores de la iniciativa, lo que falta a las bases del reglamento de concursos públicos del Colegio de Arquitectos de Chile. Por eso, alegaron que la propuesta debía ser descalificada.
El problema -critican- surgió porque antes de las votaciones, la U. de Chile publicó en su página de Twitter (@udechile) que la opción C «fue ideada y proyectada por académicos de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo» de esa casa de estudios, e invitaron a «informarse y votar».
Según Sebastián Gray, expresidente del Colegio de Arquitectos, eso es «completamente inaceptable», dentro del anonimato que debe tener un concurso público, y aseguró que con la publicación, la U. de Chile publicitó una de las tres propuestas y convocó a su comunidad a votar por ella.
Similar opinión emitió el arquitecto Tomás Echiburú, quien dijo que «pese a que en la publicación no se explicitan los autores con nombre y apellido, estos se pueden deducir sabiendo de que son académicos de la facultad».
Las bases del concurso indicaban que «los concursantes se abstendrán de revelar la identidad de sus trabajos y de comunicarse en lo referente al concurso con el Jurado o con la Directora».
Sin embargo, desde el jurado informaron que el proceso no se rigió bajo los parámetros de concursos públicos del Colegio de Arquitectos, sino que fue un «concurso de ideas» que solo buscaba desarrollar propuestas.
«Las otras dos propuestas también deben haber llamado por teléfono a sus familiares o grupos de WhatsApp (para que votaran por ellas), eso no lo podemos controlar», explicó Paz Serra, jefa de la división de Desarrollo Urbano del Minvu y directora del concurso.
Frente a esto, Teodoro Fernández, premio Nacional de Arquitectura, opinó que no hay manera de controlar este tipo de votaciones cuando se promueven para todo público. «No puede haber una votación hacia un público que no esté suficientemente formado e informado porque se presta a este tipo de cosas», planteó.
Proceso
El concurso no se rigió bajo el reglamento de concursos públicos del Colegio de Arquitectos.
Fuente: El Mercurio
