Destacan impacto que tendrá construcción de primer muelle chileno en Bahía Fildes, en la Antártica

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Solamente la base que China tiene en el continente blanco posee instalaciones similares, de menor tamaño y en el mismo sentido cabe mencionar el muelle desmontable que Chile instaló en la Base “Libertador O”Higgins”, a mucha mayor distancia de Punta Arenas que la de Bahía Fildes y que se suma a uno destinado a recibir y despachar botes Zodiac en la Base “Prat”.

Es un proyecto ambicioso y caro y por ahora es sólo eso, un proyecto cuyo estudio ya está en ejecución por encargo de la Dirección de Obras Portuarias dependiente del Ministerio de Obras Públicas.

Se trata, a futuro, de la construcción de un muelle y una explanada ad hoc y, además, dotarlo de una embarcación adecuada para el reemplazo de los pequeños botes que se utilizan en las maniobras de desembarco en el sector, a fin de que los contenedores puedan ser movilizados en forma eficiente y sin problemas mayores desde y hacia los buques que recalen a esa bahía.

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El estudio debería estar finalizado a fines de este año, pero como desafío para los ingenieros ya se ha planteado que para llevar a cabo la materialización del proyecto se otorgaría un plazo de tres años, ya que el clima sólo permite trabajar durante la temporada veraniega y, aún así, con las limitaciones propias de una zona que está a más de mil 200  kilómetros al sur de Punta Arenas.

La idea es que la infraestructura marítimo -portuaria chilena esté en un sector de Bahía Fildes, en la Península Antártica Chilena, a unos mil metros, más o menos, de las instalaciones del aeródromo “Teniente Marsh”, cercana a las viviendas de la Villa Las Estrellas y a una serie de instalaciones de las bases de Chile y de países extranjeros instaladas en el sector.

Solamente la base que China tiene en el continente blanco posee instalaciones similares, de menor tamaño y en el mismo sentido cabe mencionar el muelle desmontable que Chile instaló en la Base “Libertador O”Higgins”, a mucha mayor distancia de Punta Arenas que la de Bahía Fildes y que se suma a uno destinado a recibir y despachar botes Zodiac en la Base “Prat”.

Y si de desafíos para los ingenieros se trata, se deberá considerar no sólo las duras condiciones climáticas imperantes en el área, sino que además, la baja profundidad de las aguas de Bahía Fildes -apenas unos tres metros de calado- y que, además, se congelan durante el período invernal.

Y  hay más: de acuerdo al tamaño del proyecto, se hará necesario realizar un estudio de impacto ambiental, el cual será analizado a nivel internacional lo que significa la ejecución de esas obras en un continente que está resguardado por un compromiso de carácter mundial para proteger su prístino y casi virginal medio ambiente.

En su oportunidad,  personeros del INACh señalaron que la construcción del muelle se ejecutaría “en una localización estratégica” y que los hitos de la construcción misma no pueden ni deben ser destruidos de una a otra temporada.

Poder contar, en el futuro cercano, con ese muelle en Bahía Fildes es una sentida aspiración de las decenas y decenas de científicos que llegan hasta el área para iniciar sus estudios y exploraciones no sólo en ese sector sino que como punto de entrada a la “Antártica profunda”, con paisajes similares a Patriot Hills o al mismo Polo Sur.

Pero no sólo los científicos que van y vienen al continente blanco esperan que Chile lleve a cabo lo que ya se perfila como “una obra titánica”.

El empresariado turístico magallánico que opera hacia y desde la Antártica en la temporada estival, representado por Jaime Vásquez, de Antártica XXI, por ejemplo, también espera la concreción del ambicioso proyecto porque el muelle facilitará el desembarco de pasajeros que lleguen hasta la Bahía Fildes a conocer y admirar este patrimonio mundial que es el continente blanco con el debido resguardo y respeto por ese medio ambiente.

Por ahora, se estudian y se afinan los detalles del proyecto para dotar de un muelle adecuado a Bahía Fildes, en la isla Rey Jorge, en una lucha contra el tiempo que tiene presente, eso sí, que hay que “ir despacio, porque vamos apurados” y que “no hay que llegar primero, pero hay que saber llegar”.

Fuente: elpinguino.com