«Cuando hablamos de violencia creo que deberíamos poner en la balanza qué es lo que entendemos por violencia y las atribuciones que tiene ese concepto». De esta manera, el director del sindicato N°1 de estibadores y vocero de los trabajadores eventuales del Terminal Pacífico Sur, Pablo Klimpel, respondió a las condiciones que el gerente general de TPS, Oliver Weinreich, planteó para volver a retomar el diálogo con los trabajadores portuarios movilizados.
En entrevista con este Diario, el gerente general de TPS, señaló, entre otras cosas, que «cuando estás bloqueado y con amenazas constantes es muy difícil hacerlo (dialogar)». Y agregó: «si ceder es dialogar con gente que nos está violentando, no puedo».
Por lo mismo, el vocero de los trabajadores portuarios eventuales sostuvo que el gerente «esta mintiendo» y que por ello «radicalizamos más las movilizaciones». Lo anterior, principalmente, puesto que pese a las reuniones, que el propio Klimpel reconoce que se han tenido con los gerentes de la empresa, éstas son «lo mismo de siempre. No son mesas de trabajo. Lo único que nos dicen es que depongamos el paro y la movilización».
«El gerente de TPS acusa violencia, pero a mí también, me parece que lo que él está haciendo es igual de violento. Es violento cuando tenemos acuerdos firmados y garantizados por los ministros de Transportes, Trabajo y Agricultura, y no respeta esos acuerdos. Es violento cuando trata de sobornar a trabajadores y les ofrece más trabajo del que pagan anualmente. Es violento cuando entran trabajadores que ni siquiera tienen carnet rojo y mucho menos los permisos para trabajar. Nosotros queremos trabajar y deponer el paro, pero la empresa no nos ha dado ninguna garantía».
Por otra parte, y en cuanto a la violencia que se ha vivido en los últimos días, principalmente en las cercanías del edificio de TPS, el vocero de los trabajadores aseguró que ésta responde a la ansiedad y frustración por parte de los trabajadores eventuales movilizados.
«El problema pasa porque son más de 400 trabajadores eventuales y la ansiedad y frustración, así como también el hecho de que se abran las puertas e ingresen vehículos con policías y trabajadores que están rompiendo la huelga, hace que la gente se enoje más y se genere un descontento. Responde a la frustración que le genera a los trabajadores la falta de voluntad de diálogo de la empresa. Yo entiendo que no es la mejor forma, pero también hay que comprender los estados emocionales en los que están las personas afectadas con esto», dijo Klimpel.
En tanto, Sergio Baeza, presidente de la Cotraporchi señaló que «aquí nos conocemos todos, aquí hay mucha familia. Aquí hubo trabajadores a quienes se les apedreó la casa, el vehículo y eso es algo con lo que no estamos de acuerdo. Hay maneras de hacer las cosas y creo que acá hay gente que le está mintiendo a las bases. La empresa siempre ha dicho que quieren conversar, pero sin un bloqueo de por medio. El Estado debe entender que también es responsabilidad de ellos y no culpen de todo a los terminales».
SHARP PIDE REUNIÓN A PRESIDENTE DE EPV
Con el fin de profundizar en el diagnóstico, así como en propuestas que se han ido trabajando con distintos actores y organizaciones locales en materia de desarrollo portuario, el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, solicitó una reunión al nuevo presidente de EPV, Raimundo Cruzat. A través de una carta, el jefe comunal, junto con solicitar dicha reunión, dio cuenta de la necesidad de avanzar «acorde a la realidad actual, donde las ciudades puerto sean parte del modelo portuario», manifestó.
Fuente: El Mercurio de Valparíso