El gobierno de Estados Unidos consideró “infundado” un recurso iniciado por China ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) por las tarifas a las importaciones de acero y aluminio, alegando razones de seguridad nacional.
“La demanda de China por consultas en el marco del acuerdo de la OMC sobre salvaguardas es totalmente infundado”, afirmó en una nota la oficina del Representante estadounidense de Comercio (USTR), Robert Lighthizer.
De acuerdo con la nota, las tarifas fueron impuestas por Washington “para atender a las amenazas a la seguridad nacional que representan las importaciones de acero y aluminio y por lo tanto no pueden ser entendidas como una acción de salvaguarda”.
Por esa razón, el USTR afirmó que las medidas de represalia anunciadas por China el lunes, por un valor de unos 3.000 millones de dólares, no deberían ser consideradas.
El presidente Donald Trump anunció el 8 de marzo la adopción de tarifas de 25% a las importaciones estadounidenses de acero y de 10% a las de aluminio, en nombre de la seguridad nacional.
Estados Unidos eximió temporariamente a un grupo de países (incluyendo a México, Argentina y Brasil), pero mantuvo a China entre los países sobre los cuales la tarifación tiene efecto.
El órgano de solución de controversias de la OMC, encargado de arbitrar en conflictos comerciales, hasta ahora no se ha encargado de un caso en que la cláusula de excepción se haya invocado en nombre de la seguridad nacional.
En la OMC no existe ningún acuerdo vinculante que fije los objetivos máximos o mínimos para la reducción de tarifas, pero los países asumen el compromiso de reducir sus derechos de aduana.
Sin embargo existen excepciones posibles cuando las medidas se refieren al comercio de productos que son esenciales para proteger los intereses de seguridad nacional.
Fuente: Pulso