Las empresas privadas y públicas de los sectores portuario y de transporte de la ciudad de San Antonio, V Región, están preocupadas por el déficit de inversiones en infraestructura relacionadas con el terminal. Especialmente porque esto ocurre en medio de un fuerte crecimiento en transferencia de carga de comercio exterior en esta zona, que está llegando a niveles previstos para 2023. Esto se intensificó, además, debido al paro portuario en Valparaíso.
Así lo señala María Pilar Larraín, gerenta general de la Comunidad Logística de San Antonio (Colsa), entidad que agrupa a firmas como STI, Puerto Central, la estatal Empresa Portuaria San Antonio, Saam, Graneles de Chile, Agunsa, Fepasa y la Empresa de los Ferrocarriles del Estado, entre otras. La ejecutiva detalla los proyectos viales, ferroviarios y logísticos que se necesitan para la zona, varios retrasados y por los cuales han abogado ante diversas autoridades. Estos planes suman más de US$ 840 millones.
En el listado de iniciativas «urgentes» que elaboró Colsa destacan al menos ocho obras. Una de estas es la concesión del Camino de la Fruta, carretera de 142 kilómetros que uniría a San Antonio con la Ruta 5 Sur. La entidad sitúa esa inversión en US$ 552 millones y afirma que permitiría sacar de circulación a camiones del área urbana de Santo Domingo y San Antonio.
Esa postergada licitación vial sufrió ayer un nuevo cambio. El Ministerio de Obras Públicas informó que los procesos de recepción de ofertas y posterior apertura de los sobres económicos previstos para el 27 de diciembre de este año y 24 de enero de 2019, respectivamente, se aplazaron para el 29 de marzo y 26 de abril próximos. Esto para que los interesados tengan más tiempo para desarrollar sus propuestas.
Fuente: El Mercurio