Un peritaje elaborado a petición de la fiscalía ha determinado que no es necesario demoler el puente sobre el río Cau Cau construido en la ciudad de Valdivia por la empresa española Azvi.
Las conclusiones de este informe, realizado por la Dirección de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de la Pontificia Universidad Católica de Chile (Dictuc), fueron dadas ayer a conocer a las partes en la causa abierta por el ministerio público para determinar responsabilidades.
Según un comunicado remitido hoy a Efe por la empresa Ezvi, «los resultados del completo peritaje elaborado a petición del ministerio público permiten descartar con fundamentos técnicos la demolición del puente, como lo ha planteado invariablemente el Ministerio de Obras Públicas (MOP)».
«El puente funciona, fue bien construido y es reparable; no hay razón para demolerlo», asevera la compañía.
Entre los datos reunidos en los estudios figura una prueba de carga «que demostró que los brazos del puente está bien construidos y que el sistema de levante es susceptible de ser reparado, a un costo sustancialmente menor que el que implicaría construir un nuevo puente», asegura Azvi.
«Asimismo, el Dictuc comprobó fehacientemente que existe la trazabilidad del acero empleado en su construcción, por lo que el puente está bien construido», recalca el comunicado.
La compañía reconoce, no obstante, que el peritaje «constató que el diseño del sistema mecánico de levante del puente tiene graves errores en el proyecto original y debe ser reparado».
Los informes del Dictuc fueron expuestos este miércoles en la sede de la Fiscalía Nacional Centro Norte, al fiscal adjunto, José Morales Opazo y las partes intervinientes de las causas abiertas por los delitos de fraude al fisco y prevaricación.
En declaraciones a radio Bibío, el gerente general de Azvi, Alejandro Orozco, desestimó la demolición de la obra.
«Si esta trazabilidad significa que los tableros metálicos del puente están bien construidos, esta comprobación destruye la justificación esgrimida por el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, quien dijo públicamente que había que destruir el puente y construir uno nuevo».
Respecto al estudio sobre el montaje del puente en las riberas contrarias, la empresa sostiene que «el estudio del Dictuc permite concluir que existió un error de diseño de responsabilidad del MOP».
«Existieron planos incongruentes y con errores en la ubicación de diversos elementos. Este error en los planos del proyecto del MOP provocó el montaje del puente al revés», asevera la compañía.
Por otro lado, y según documentos obtenidos recurriendo a la Ley de Transparencia, «se ha podido demostrar que el MOP manipuló los informes de su consultora, la empresa VMB, intentando eludir su responsabilidad por el error en los planos del proyecto que provocó el montaje del puente al revés», denuncia el comunicado de Azvi.
Al considerar el informe del Dictuc que los errores de la obra se remontan a la fase de elaboración de planos y diseños, la fiscalía estaría considerando desestimar la comisión de un delito de fraude al fisco por parte de la empresa, informó hoy radio Biobío.
En relación con el delito de prevaricación que se le atribuye en esta causa al ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, fuentes de la investigación citadas por ese medio indicaron que el ministerio público insistirá en acreditar la comisión del delito.
El Séptimo Tribunal de Santiago decidirá el próximo martes si se mantiene vigente la persecución penal contra el titular del MOP o bien se acoge el argumento de su defensa en el sentido de que la investigación en su contra sea archivada. EFE
Fuente: Estrategia