Gobierno regional y la Dirección de Obras Portuarias están definiendo el convenio pan avanzar a la siguiente fase de diseños definitivos, que estarán listos entre 2018 y 2019.
A una nueva fase avanzó el proyecto de construcción de una dársena portuaria —parte resguardada artificialmente en aguas navegables para la carga y descarga de embarcaciones—que se pretende materializar en el área de Bahía Catalina, al norte de Punta Arenas.
El término de los estudios de ingeniería, que por un lado miden las variables y factibilidades marinas, y por el otro, las condiciones de suelo terrestre para todas las obras necesarias del proyecto, permiten ahora pasar al desarrollo del diseño definitivo en ingeniería y arquitectura para definir las bases técnicas del futuro llamado a licitación.
La propuesta de ingeniería básica terminada estima que el proyecto exigirá una inversión cercana a US$170 millones, aunque con otros estudios anexos de suelo, que están sugeridos, podría abaratarse un poco el costo estimado.
El jefe de la División de Desarrollo Regional, Ricardo Foretich, entidad que actúa como unidad ejecutora de este proyecto en el marco del Plan de Zonas Extremas, explica que trabajan con la Dirección de Obras Portuarias para formalizar un convenio de trabajo conjunto para el diseño definitivo, que debería estar listo entre 2018 y 2019.
«El gobierno regional podría ver aspectos ambientales y obras preliminares de preparación del terreno, mientras que la Dirección de Obras Portuarias debiera preocuparse de la expropiación de los terrenos y las obras de ingeniería», señala.
La dársena portuaria se ubicará en un área perteneciente a la Empresa Portuaria Austral. Allí se dragará una importante porción de terreno para conformar mil metros de perímetro, divididos en cuatro áreas para el atraque de naves de hasta 300 metros de largo, en promedio.
La idea es ofrecer mayores capacidades para barcos portacontenedores, cruceros turísticos y buques científicos, que potencien la proyección de Punta Arenas hacia la Antártica.
Precisamente, el desarrollo de esta infraestructura portuaria —que se complementará con el actual muelle Santos Mardones, situado en el sector— se erigirá en terrenos anexos a donde se construirá el futuro Centro Antártico Internacional, que concentrará la actividad logística y científica en el Continente Blanco.
El presidente de la Empresa Portuaria Austral, Mario Maturana, opina que la dársena es un antiguo proyecto —su construcción se viene anunciando desde 1993—, necesario para ofrecer aguas protegidas a las naves que recalan en el sector. «El gobierno regional ha realizado los estudios porque este es un proyecto amparado en el Plan de Zonas Extremas», recalca, apuntando al hecho de que dicha iniciativa ha permitido darle viabilidad por el lado de los recursos necesarios para llevarlo a cabo.
Fuente: El Mercurio
