Advierten ventajas comerciales, pero también algunas dudas respecto a normas de origen.
Aunque el debate más intenso está por venir, sobre todo cuando sea revisado por el Congreso Nacional, el acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP) ya genera diversas opiniones respecto a su conveniencia. Y en la región sucede algo similar.
«En este acuerdo se establecen los fundamentos esenciales de nuestra economía actual, fundada en la promoción y el desarrollo de la educación, la ciencia y la tecnología, la investigación y la innovación, los cuales desempeñan un papel importante en acelerar el crecimiento, mejorar la competitividad, crear empleos y expandir del comercio, la inversión y la diversificación productiva», advierte el presidente de la Cámara Regional de Comercio de Valparaíso (CRCP), Pier-Paolo Zaccarelli.
El líder gremial consigna que el intercambio comercial de Chile con los países del TPP llegó a US$ 38.130 millones en el año 2015, lo que representó el 30% del comercio de Chile en ese año. «En cuanto a las exportaciones, el TPP significó un 30% de las mismas, mientras que las importaciones fueron un 31% en ese mismo año», agrega.
Entre las ventajas de ser parte de este bloque, enfatiza que al ser parte del esquema económico más grande del orbe -que representa el 40% del PIB mundial- el país podrá obtener ventajas, no solo en el sector exportador hortofrutícola y de vinos, que ya goza de rebajas arancelarias en la mayoría de estos países, sino que en otros rubros con gran potencial de crecimiento, como las carnes, los lácteos, las semillas, los alimentos procesados, los ingredientes y los productos gourmet.
«A eso se agregan los avances logrados en pro de reglas de origen flexibles, facilitación del comercio, acceso a los mercados de compras públicas y aspectos arancelarios, entre otros temas. Por lo tanto, el TPP anima a que haya una mayor coordinación interagencia o interservicios públicos para que no haya duplicidades, superposiciones o inconsistencia en los criterios», subraya Zaccarelli quien enfatiza que se está ante una gran oportunidad, también para las grandes empresas.
«Hay que considerar los cerca de 1.600 productos que estaban excluidos en los acuerdos bilaterales y que tendrán ahora acceso preferente en estos mercados y las pequeñas y medianas empresas contarán con mejores opciones frente a los obstáculos que significan las barras paraanceralarias».
El desafío, asegura, está en potenciar a las empresas y emprendimientos en su internacionalización para que sus productos y servicios alcancen una mayor cantidad de potenciales clientes. «Se requerirá desarrollar nuevos sectores, que implican un uso más intenso de la tecnología y la innovación, lo que hace necesario capacitarlas y darles herramientas para que accedan a los mercados», puntualizó.
El vicepresidente (s) de la Cámara Aduanera, Javier León, advirtió que solo en marzo se podrá acceder a una traducción correcta del tratado, por lo cual prefiere esperar.
Sin embargo, advierte que las áreas donde más le interesa aclarar detalles es en lo que respecta a las normas de origen. «Supuestamente existe a favor el tema de que con este pacto se podrán traer materias primas de los países que pertenecen al acuerdo, armarlo acá y de aquí exportarlo. Eso va a ser de origen chileno o del TPP en el fondo», explica el personero, que apunta especialmente a la manera en que va a funcionar este tratado.
«Eso es muy importante al igual que la triangulación que se va a producir y hay que ver cómo van a funcionar, además que muchos ya existen en los tratados de libre comercio que Chile tiene con otros países».
En el sector de las pymes, enfatizan la falta de información que aún existe, lo que preocupa por los impactos que pudiera tener este tratado.
«El TPP representa el 40% de la economía mundial y un 25% del comercio internacional. En ese sentido, los emprendedores valoramos la integración económica de los países, pero también creemos que ha faltado información sobre este acuerdo, por lo que esperamos que el Gobierno sociabilice más sus alcances y el impacto que podría tener en las Pymes nacionales para asegurar que no las afecte bajo ningún aspecto», señaló el presidente de la Asociación de Emprendedores de Chile (Asech), Juan Pablo Swett.
«Se requerirá desarrollar nuevos sectores, que implican un uso más intenso de la tecnología y la innovación», Pier-Paolo Zaccarelli Presidente CRCP
2años tiene el Congreso Nacional para aprobar o rechazar el acuerdo firmado en Nueva Zelanda.
40% del PIB de la economía mundial se concentra en los doce países que forman parte del acuerdo.
16,4% cayó el mercado automotriz a nivel nacional durante el año pasado, de acuerdo a la industria.
Fuente: El Mercurio de Valparaíso
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