Con un gran avance de un 80% en las obras de reconstrucción se encuentra el Terminal de Pasajeros del Terminal Puerto Coquimbo (TPC), que desde el año 2014 ha recibido a los cruceros en la región y cuya infraestructura quedó totalmente destruida tras el terremoto y tsunami del año 2015.
Los trabajos de reparación del terminal de cruceros se iniciaron el 8 de agosto pasado y se han ejecutado en los plazos estipulados, logrando a la fecha la habilitación completa del edificio del terminal y sus accesos peatonales.
Con ello, el recinto podrá recibir este sábado 22 de octubre el primero de 16 cruceros de la temporada 2016-2017 que arribarán a la Región de Coquimbo. Se trata del lujoso buque Insignia de 181 metros de eslora, 25.73 metros de manga, 5.9 metros de calado y 30.200 toneladas. Esta nave con bandera de Islas Marshall, llega proveniente de Iquique con 684 pasajeros y 400 tripulantes.
“Hemos trabajado arduamente todos en TPC para poder devolver a la ciudad este importante terminal de cruceros tras el grave daño que sufrió por el terremoto. Ya estamos listos para recibir el primer buque de pasajeros y en los próximos días culminaremos los trabajos en su totalidad para continuar con el arribo de estas naves que traen más de 20 mil visitantes cada año y permiten reactivar la economía local a través del turismo”, afirmó Rodrigo Trucco, gerente general de TPC.
Las obras han significado, entre otras cosas, la reparación de tabiquería interior, pulido de baldosas e instalación de puertas; instalaciones eléctricas, red de datos, agua potable y alcantarillado; revestimientos exteriores y reposición de listones de madera dañados, baños, bodega, ventanales termo-panel y puertas de aluminio. Además, se han adquirido muebles y una nueva máquina de rayos x para los controles de rutina en las recaladas de cruceros.
Posteriormente, TPC continuará con la ejecución del 20% restante de las obras de reconstrucción relacionadas con los pavimentos del muelle de pasajeros, baldosas y adoquines, y la instalación de barandillas y pasamanos. De esta forma, el terminal de pasajeros quedará en óptimas condiciones la primera semana de noviembre para recibir a naves de mayor tamaño.
