La meta es realizar tres embarques en el año, el próximo sería en marzo, y llegar a un total de 21 mil ejemplares enviados.
Si hace un año fue China el mercado de exportación de vacas lecheras, esta vez es el turno de Turquía, país que ya recibió los primeros 7.000 ejemplares a fines de diciembre y para marzo se espera el segundo embarque con la misma cantidad de animales.
“Chile es un país muy sano, es la razón por la que nos compran, además de la calidad genética. Hoy a los productores que invirtieron en genética se les está pagando bien por su producto, es un buen incentivo para seguir criando”, explicó Alejandro Vial, gerente general de Tattersall.
En el primer envío, que partió los primeros días de diciembre y duró 32 días, se mandaron 3.500 terneros de la Región de Aysén y los restantes 3.500 provenían de distintas partes de la zona centro sur del país, proceso en el que la tasa mortalidad fue muy cercana al 0%.
Las razas que pidieron desde Turquía fueron la Angus, Hereford y Claveles, todos machos para engordar y luego faenar, menores a un año y con un peso entre 180 a 240 kilos.
Vial agregó que este año el mercado se ve auspicioso y esperan enviar dos barcos más a Turquía, con 7 mil animales cada uno, cerrando el año con un total de 21 mil cabezas de ganado.
En este proceso Tattersall tiene un acuerdo comercial de exclusividad con la empresa de capitales holandeses Hunland, donde juega un rol de intermediario.
Evaluación de China
En enero de 2015 se realizó el primer embarque de vaquillas a China. El mercado se veía auspicioso, sin embargo con la caída del precio de la leche y la situación económica de dicho país, terminaron por derrumbar las expectativas.
“Somos muy poco competitivos en términos de precio, en comparación a Nueva Zelanda y Australia. Además, el principal factor que afecta hoy día es el hecho que se está pasando un período de menor crecimiento que el que han tenido normalmente”, agregó el gerente comercial de la cooperativa osornina Cooprinsem, Felipe Gottschalk.
Pese al escenario actual, desde Cooprinsem realizaron una buena evaluación del mercado. En total fueron cuatro embarques, 23 mil vaquillas exportadas y una oportunidad para los productores y clientes.
El principal motivo de este tipo de exportaciones, tanto a China como Turquía, fue la baja en el precio de la carne, razón por la cual los productores buscaron nuevos horizontes y obtuvieron ganancias de 30% a 35% sobre el precio que normalmente pueden vender en Chile.
Próximos mercados
Con el mercado chino parado, los productores están en conversaciones con nuevos países para enviar vaquillas Holstein, que tiene un rendimiento de unos 6.000 litros de leche.
“La semana pasada tuvimos una reunión con el SAG y estamos estableciendo protocolos para exportar ganado en pie con México, Ecuador, Rusia, Egipto y Estados Unidos”, dijo Gottschalk.
Fuente: Diario Financiero
