Dos declaraciones claves tomará la Fiscalía de Puerto Montt, a propósito de la investigación desformalizada que lleva adelante en el marco de determinar la existencia de delitos en el polémico vertimiento de salmones muertos al mar.
Según fuentes al tanto de la investigación, en calidad de imputados se les tomará declaración al subsecretario de Pesca, Raúl Súnico, y al director regional de Sernapesca en Los Lagos, Eduardo Aguilera.
La diligencia estará a cargo de la fiscal Pamela Salgado, quien es especialista en delitos medioambientales. Además estarán presentes los detectives de la Brigada Investigadora de Delitos Medioambientales de la PDI, quienes han participado en levantamientos de muestra y visitas a terreno, en el contexto de la indagatoria.
Ambos personeros fueron notificados por escrito a esta diligencia. El primero en prestar declaración será Aguilera, quien está citado hoy a las 9 horas en dependencias de la Fiscalía Regional. En tanto, Súnico deberá presentarse mañana en las oficinas del ente persecutor.
Sobre el origen de ambas citaciones, se indicó que son el resultado de una serie de testimonios recabados entre funcionarios de los servicios públicos implicados y, además, de los gerentes de las empresas salmoneras de la zona.
Delitos
En dos posibles delitos se ha centrado la Fiscalía Regional, a propósito del vertimiento de más de 4 mil toneladas de salmones muertos a 139 kilómetros en el Océano Pacífico.
Uno de los ilícitos da cuenta del artículo 136 de la Ley de Pesca. Este indica que «el que introdujere o mandare a introducir en el mar, ríos, lagos o cualquier otro cuerpo de aguas, agentes contaminantes químicos, biológicos o físicos, que causen daño a los recursos hidrobiológicos, sin que previamente hayan sido neutralizados para evitar tales daños, será sancionado con multa de 50 a tres mil unidades tributarias mensuales (UTM). Si procediere con dolo, además de la multa, la pena a aplicar será la de presidio menor en su grado mínimo».
El Ministerio Público también esta basando la indagatoria en el artículo 291 del Código Penal: «Los que propagaren indebidamente organismos, productos, elementos o agentes químicos, virales, bacteriológicos, radiactivos o de cualquier otro orden, que por su naturaleza sean susceptibles de poner en peligro la salud animal o vegetal, o el abastecimiento de la población, serán penados con presidio menor en su grado máximo».
Aproximadamente, 13 millones de peces murieron en marzo, como consecuencia de florecimiento de algas que afectó a 20 centros de cultivo de salmones. La gran cantidad de salmones murieron a raíz de la falta de oxígeno en el mar. Incluso, durante la crisis de la Marea Roja, se especuló que sería el punto de inicio del estallido (ver recuadro).
¿Y LA MAREA ROJA?
Un comité de científicos, ordenado por el Gobierno, descartó vínculos entre la Marea Roja y el vertimiento de salmones muertos al mar. De hecho, la investigación de la Fiscalía apunta a posibles delitos medioambientales en cómo se autorizó el derrame de la biomasa muerta en las costas del Océano Pacífico.
Fuente: El Llanquihue