Tras el bloqueo que afectó a dos cruceros en el puerto de Valparaíso la semana pasada, y la amenaza latente de que el episodio pueda repetirse a futuro, mientras se mantenga el conflicto de las cargas limpias, tiene inquieto al sector turismo del país.
Es que se temen las consecuencias que puede tener esto junto con lo acontecido el pasado 15 de febrero, cuando un paro portuario afectó a 3.000 pasajeros que debieron esperar tres horas antes de poder hacer sus actividades. Ante esto, las expectativas se centran en lo que ocurrirá en el marco de la Feria Seatrade, evento que reúne a todas las áreas de negocios relacionadas con los cruceros a nivel global, y que se realizará desde mañana y hasta el jueves en Fort Lauderdale, Estados Unidos.
Entrevista a vicepresidenta ejecutiva de la Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur), Andrea Wolleter :
¿Lo que está en juego? Se estima que la industria de cruceros durante esta temporada -que se extiende hasta abril- tendrá ingresos por más de US$ 70 millones al país y se proyecta que se podría generar más de US$ 100 millones de aquí a cinco años.
«Pero para lograr este crecimiento se debe poner especial atención al correcto desarrollo de la actividad de cruceros en el país», comenta la vicepresidenta ejecutiva de la Federación de Empresas de Turismo de Chile (Fedetur), Andrea Wolleter, que destaca que durante años la entidad ha luchado para que la industria de cruceros vuelva a poner sus ojos en Chile ante la sostenida caída que se observaba en las llegadas.
-¿Cuál es la visión que tienen ustedes de este conflicto y particularmente de lo que aconteció en Valparaíso hace ya casi un mes?
-Nosotros como Fedetur estamos muy preocupados por lo que ha pasado con el tema de los cruceros en Valparaíso, lo que se suma a un episodio de bloqueo en Puerto Montt. Hay un tema de imagen país, luego hay un aspecto económico porque en el caso de los bloqueos los pasajeros sencillamente no pueden desembarcar. No pueden conocer la región, los tours que estaban contratados se pierden, entonces claramente hay un perjuicio y en suma los turistas se quedan sin la posibilidad de conocer un destino.
-¿Y cuál es la principal inquietud que tiene el gremio en este momento de cara a la próxima Seatrade?
-Nuestra principal preocupación es lo que se está generando en las empresas del rubro. Nosotros llevamos muchos años trabajando con el tema de los cruceros y se han tomado muchas acciones para conseguir que ellos volvieran a Chile, que aumentaran sus recaladas en los puertos del país. El problema es que todas estas cosas que han pasado en el último tiempo, más precisamente durante este año, hacen que las compañías de cruceros miren con mucha preocupación el operar en Chile.
-¿Qué estrategia entonces deben asumir los representantes de Chile en la Seatrade?
-Hoy día la responsabilidad que tenemos nos dice que hay que sentarse con los empresarios de cruceros para poder acordar algunas acciones y darles la tranquilidad de que van a poder operar durante la próxima temporada en forma tranquila. Es decir, que el tema va a funcionar y van a tener aseguradas sus recaladas en los distintos puertos, que no va a haber bloqueos, etc. O sea que tengan las condiciones para que puedan operar.
-¿Cómo deberían las autoridades chilenas abordar estas problemáticas en aquella instancia?
-Me parece que hay que ir y plantearse de manera transparente, asumir lo que ha pasado durante esta temporada porque ya es un hecho y buscar distintas soluciones, y comprometernos que se van a evaluar todas las opciones necesarias para la operación y, luego de ello, asegurarles y darles las garantías que ellos requieren.
-¿Cómo evalúa la posibilidad de que se suban las tarifas para cruceros en los terminales? Parece una señal en contra de la estrategia del país.
-Pienso que obviamente los concesionarios del puerto tienen un negocio y por supuesto es su obligación velar por él y es absolutamente válido. Lo que pasa es que también tenemos que preocuparnos de ser competitivos como país.
-Es decir buscar un equilibrio…
-Hace unos años atrás se trabajó muchísimo en relación a las tarifas que tenían que pagar los cruceros, para así plantearnos como país de manera más competitiva, entonces si bien desconozco los márgenes que nos permitirían seguir siendo competitivos hay que buscar el equilibrio que haga que para el concesionario el negocio también sea atractivo el recibir a las compañías de cruceros.
-¿Qué se puede hacer en esa línea entonces?
-El tema de los cruceros es una industria que nosotros la queremos porque nos trae visitantes, nos ayuda a la imagen país y, en fin, genera una serie de beneficios. Creo que hay que buscar mecanismos para darle prioridad a las naves de cruceros.
«Hay que ir y plantearse de manera transparente, asumir lo que ha pasado durante esta temporada porque ya es un hecho y buscar distintas soluciones»»
3.500 pasajeros se vieron afectados por el paro portunario del pasado 15 de febrero. Los que se suman los 3.400 que arribaron la semana pasada en dos cruceros y uno de ellos debió desembarcar a la gira.
70 millones de dólares es lo que se estima que genere la insdustria de los cruceros al país durante esta temporada, la cual finalizará en abril. Durante este tiempo llegarían 7 nuevos cruceros.
13 de marzo se dará inicio a la Feria Seatrade. Éste será el momento en que las empresas de turismo presentarán acciones para garantizar que la próxima temporada sea más tranquila.
Fuente: El Mercurio de Valparaíso